Pese a que la presidenta de la Comunidad de Madrid ha asegurado que en dicha autonomía no se adoctrina, la consejería de Educación ha apoyado que en un instituto se impartan clases sobre temática afectivo sexual sin que los padres estén informados.

Hace unas semanas, una madre envió a Esperanza Aguirre una queja sobre la impartición en el Instituto de la localidad de Pozuelo de Alarcón en el que estudian sus hijos de clases complementaria sobre educación afectivo sexual, sin previo aviso a los padres, en ocasiones avisándolas de un día para otro y sustituyendo en ocasiones a asignatura como Matemáticas, Geografía o Lengua.

En la carta de esta madre de familia, se detallaba que en esas clases se recomineda a los menores de el uso de anticonceptivos, del recurso al aborto ante un embarazo inesperado, de la forma de usar un preservativo o de cómo debe considerarse la homosexualidad.

El encargado de responder a la queja de esta madre fue José Macías Velázquez, director del área territorial de Educaicón de Madrid-Oeste, quien justificó esta educación sexual obligatoria.

La portavoz de Madrid Educa en Libertad, María Menéndez, denuncia que «el escrito de la Consejería de Educación avala completamente la educación sexual obligatoria en los centros, al margen de las conviccopnes y la libertad de los padres, algo que contradice el artículo 27.3 de la Constitución Española y las sentencias del Tribunal supremo de febrero de 2009 sobre objeción a educaicón para la ciudadanía».