Entre 300 y 400 alumnos serán los que formarán parte de las promociones inaugurales del colegio Juan Pablo II de la Fundación Educatio Servanda, que basa parte de su proyecto pedagógico en la educación diferenciada. Y las familias de la madrileña localidad de Alcorcón parece que están entusiasmadas con la idea, pese a los ataques proferidos por el alcalde de la localidad, el socialista Enrique Cascallana. En apenas cinco semanas, y prácticamente por el boca a boca, más de 200 familias se han interesado por este proyecto educativo.

Frente a las acusaciones de ser un proyecto «superideologizado» y «ultraconservador» según el parecer del regidor alcorcoleño, el director del Juan Pablo II, Carlos Martínez, asegura que hoy por hoy, «lo moderno es acudir a las educación diferenciada». Así lo demuestra el crecimiento que este tipo de centros ha experimentado en los últimos años en países como Estados Unidos, Inglaterra o Alemania, país en el que incluso la diferenciación se realiza en exclusiva en asignaturas de tipo instrumental.

Por otra parte, frente a los anuncios realizados ayer por el alcalde, de continuar con los recursos contencioso administrativos, Martínez definede que no hay nada que hacer en ese sentido, pues ya existe una sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.