El mensaje hecho público hoy por el Vaticano sobre la cuestión de los abusos sexuales no esconde que «los errores cometidos en las instituciones y poor responsables eclesiales son particularmente reprobables, dada la responsabilidad educativa y moral de la Iglesia». Sin embargo, pone el acento en que hay que contextualizar al considerar que «todas las personas objetivas e informadas saben que la cuestión es mucho más amplia, y que concretar las acusaciones solo sobre la Iglesia lleva a falsear la perspectiva».

En ese sentido y a modo de ejemplo, el padre Federico Lombardi señala en dicho mensaje que en Austria se han denunciado 17 casos relacionados con la Iglesia y 510 en otros ambientes, de los que asegura también «es bueno preocuparse». 


Según señala el comunicado, las principales instituciones eclesiásticas implicadas «han afrontado la manifestación de lproblema con oportunidad y  con decisión. Han dado prueba de voluntad de transparencia, en un cierto sentido han acelerado la manifestación del problema  invitando a las víctimas a hablar, aún cuando se trataba de casos de hace mucho tiempo».