(Juan Vicente Boo/Abc) El Santo Padre inició la felicitación de la Pascua en 63 idiomas con un saludo especial a los damnificados por el terremoto del Abruzzo, a quienes invitó a “continuar unidos en la construcción de un futuro abierto a la esperanza”. Benedicto XVI desea desplazarse a la zona para visitar a los heridos y a las miles de personas que han perdido sus casas en cuanto los servicios de socorro hayan logrado estabilizar la situación. En su mensaje al mundo entero al término de la misa que conmemora la Resurrección de Jesús, el Papa solicitó “esfuerzos renovados, perseverantes y sinceros para la solución del conflicto palestino-israelí”, pues “la difícil pero indispensable reconciliación” es el único fundamento para “un futuro de seguridad común”. “Devolver la esperanza” En una rápida ojeada a los problemas del mundo, Benedicto XVI reconoció que vivimos “tiempos de escasez global de alimentos, desbarajuste financiero, pobrezas antiguas y nuevas, preocupantes cambios climáticos, violencias y miserias”. En ese panorama, al que se añade “el terrorismo siempre amenazador y los temores frente a la incertidumbre del mañana, es urgente redescubrir perspectivas capaces de devolver la esperanza”.