(ACI/ReL) Para el sacerdote, este cirio se "burla de Jesús" y "se denigra a uno de nuestros queridos santos de una manera no muy santa". "Me llama la atención que en un vecindario familiar, algún vendedor tenga algún tipo de odio como para llevar tal mercancía solo para ganar unos dólares", escribió el P. La Torre en el boletín de su parroquia, de acuerdo a lo informado por el San Francisco Chronicle. Robert Ramsey y David Eiland, los dueños del negocio en donde se vende el cirio, comentan que ya han vendido unos 700 desde Navidad. "Esto es solo por diversión", dice Ramsey.