La oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha concedido este martes el Premio Nansen para los Refugiados de 2013 a la monja congoleña Angélique Namaika, que trabaja en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC) en favor de las víctimas del desplazamiento y de los abusos por parte del grupo terrorista ugandés Ejército de Resistencia del Señor (LRA, por sus siglas en inglés).


Según la agencia para los refugiados de la ONU, la hermana Angélique Namaika, a través de su Centro para la Reintegración y el Desarrollo, "ha ayudado a transformar las vidas de más de 2.000 mujeres y niñas que han sido obligadas a huir de sus hogares y que han sufrido abusos, principalmente a manos del grupo rebelde LRA".

Muchas de las mujeres a las que ha ayudado han sufrido secuestros, trabajos forzosos, apaleamientos, asesinatos, violaciones y otros abusos de Derechos Humanos, ha precisado este martes ACNUR en un comunicado. "Su enfoque personalizado las ayuda a recuperarse del trauma y el daño", ha añadido la organización.


Además de los abusos que han sufrido, estas mujeres y niñas vulnerables a menudo son rechazadas por sus propias familias y comunidades a causa de las experiencias que han vivido, por lo que "se necesita un cuidado especial para ayudarlas a curarse y recomponer sus vidas", según ACNUR.

"La hermana Angélique lo hace ayudándoles a formarse como comerciantes, a montar un pequeño negocio o a regresar a la escuela", ha explicado la agencia de refugiados.

"Los testimonios de estas mujeres muestran el importante impacto que ha tenido la hermana Angélique ayudándolas a cambiar sus vidas", hasta el punto de que "muchas de ellas la llaman con cariño ´madre´", ha agregado.


El anuncio de la ganadora del premio Nansen coincide con la publicación de un informe sobre las personas desplazadas a causa de la violencia del LRA. Desde 2008 se estima que unas 320.000 personas se han visto forzadas a huir de la Provincia Oriental, en el noreste de la RDC.

El informe, elaborado por ACNUR y el Centro de Seguimiento de Desplazamiento Interno (IDMC por sus siglas en inglés), subraya que la violencia del LRA "ha provocado un trauma grave y duradero tanto para los secuestrados como para las cientos de miles de personas que todavía temen regresar a sus hogares", ha indicado la agencia.


La propia Angélique se vio desplazada por la violencia en 2009 cuando vivía en la ciudad de Dungu, en la Provincia Oriental. "Conoce el dolor de tener que huir de su hogar y eso es, en parte, lo que la mueve a trabajar cada día para ayudar a los que lo necesitan", ha destacado ACNUR.

"La hermana Angélique trabaja sin descanso para ayudar a mujeres y niñas que son extremadamente vulnerables debido a su trauma, la pobreza y el desplazamiento", ha declarado el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, António Guterres. "Los retos son muchos y eso hace su trabajo aún más destacable; ella no permite que nada se ponga en su camino", ha añadido.

La hermana Angélique recibirá el Premio Nansen para los Refugiados y la Medalla Nansen en una ceremonia que se celebrará en Ginebra el próximo 30 de septiembre. El evento contará con la presencia del popular escritor Paulo Coelho [autor superventas de espiritualidad  "nueva era", incompatible con el catolicismo; nota de ReL]  y con las actuaciones musicales de la cantautora británica Dido, la malasia Yuna y los músicos malienses Amadou y Mariam, nominados a un Grammy.

Tras la ceremonia, la hermana Angélique viajará a Roma, donde será recibida en el Vaticano por el Papa Francisco el día 2 de octubre, antes de partir hacia París, Bruselas y Oslo para mantener otros encuentros.