Pide la libertad bajo fianza - arriesga la vida - la novena víctima cristiana de la controvertida "ley sobre la blasfemia": se trata de Ruqqiya Bibi condenada por el tribunal de Kasur en 2010 (en Punjab) a 25 años de prisión por "profanar el Corán" por tocarlo con las manos sin lavar, junto con su esposo, Munir Masih, también condenado a la misma pena.

Después de ocho meses de prisión, los abogados de la mujer - respaldados por la organización CLAAS (Centro de Asistencia Legal y Resolución de Ayuda) - han pedido la libertad bajo fianza y el Tribunal Superior de Lahore decidirá en una audiencia programada para el próximo 10 de noviembre. Para el marido Munir, la misma petición ha sido enviada, pero como informan las fuentes de Fides "es probable que sean víctimas de ejecuciones extrajudiciales a manos de extremistas islámicos, que no admiten que los ´blasfemos´ están vivos y libres". "La historia de los cónyuges Masih es un ejemplo clásico del abuso de la ley de blasfemia y de cómo los cristianos sufren persecución en Pakistán, perseverando en la fe en Cristo", señala la fuente de Fides.