Jim Caviezel, actor que dio vida a Jesús en La Pasión de Cristo, está inmerso en la promoción de su nueva película Pablo, Apóstol de Cristo, donde interpreta al evangelista San Lucas. Sin embargo, durante una entrevista con USA Today, el actor estadounidense habló del esperado proyecto sobre la resurrección de Cristo y que será una secuela de La Pasión, y que igualmente dirigirá Mel Gibson.

Hace meses el propio director confirmó que se lanzaría a este proyecto y más tarde Randall Wallace, guionista de Braveheart con Gibson, dijo en otra entrevista que ya estaba escribiendo la historia de la resurrección de Cristo.


Caviezel ha aportado otra novedad. El actor ha informado que repetirá su papel como Jesús, lo que en su momento casi le arruinó su carrera en Hollywood, tal y como él mismo confirmó, pues su brillante interpretación no gustó a muchos de la industria debido al mensaje inequívoco de la película.

“Hay cosas que no puedo contar que asombrarán a la audiencia. Es grande. Sigan a la espera”, ha afirmado ahora Caviezel, conociendo la expectación que la película levantará entre el público cristiano. Cabe recordar que La Pasión de Cristo, estrenada en 2004, tuvo un presupuesto de 30 millones de dólares y recaudó más de 600.


Mel Gibson y Jim Caviezel, durante el rodaje de La Pasión de Cristo


Siguiendo con el proyecto sobre la resurrección, el actor añadió que “no voy a decir cómo va a hacerlo pero les diré esto: la película que va a hacer será la más grande de la historia. Es así de buena”.

En 2016, Mel Gibson confesaba que “estamos tratando de crear esto (la resurrección) de una manera cinematográfica convincente y esclarecedora, para que brille nueva luz, si es posible, sin crear algo extraño”.


Hace unos meses Jim Caviezel ya hablaba de su ilusión sobre realizar esta película. “Quiero trabajar con Gibson de nuevo. Esta vez será una película sobre la resurrección. Si La Pasión de Cristo inspiró a tanta gente a hacer el bien, ¿por qué no lo intentamos de nuevo? Siento que hay un propósito en mi vida otra vez”.

Sobre su interpretación de Cristo, Caviezel aseguraba que “fue el esfuerzo más difícil” que ha llevado a cabo puesto que “no hay nada más glorioso y al mismo tiempo más humillante” que este papel.  En su opinión, no hay “nada” que hubiera podido enseñarle de mejor forma la “humildad”.