Murió el pasado 8 de septiembre en California el popular escritor de novelas de ciencia ficción Jerry Pournelle (www.jerrypournelle.com), autor de clásicos escritos en colaboración con Larry Niven como El Martillo de Lucifer, La Paja en el Ojo de Dios, la saga de los Jenízaros y creador del mundo del CoDominium.

Era católico practicante y conservador, acudía a la parroquia de San Francisco de Sales de Sherman Oaks (www.sfdsparish.com), California. Tenía un hijo y una hija.
 
Su esposa cantaba en el coro y ambos figuraban en la lista de parroquianos enfermos por los que rezar. Sobrevivió a un tumor cerebral cancerígeno en 2008 y a un ataque al corazón en 2014. Con todo, a sus 84 años, estaba bastante bien de salud y siempre activo. Acababa de volver de una convención de ciencia ficción, explicó en su blog que se sentía un poco mareado y murió por la noche mientras dormía.
 
La parroquia acogió el servicio memorial y la familia agradeció las oraciones por él, animando a quien quisiera expresar apreciación a entregar donativos en su nombre a un fondo médico benéfico de la Asociación de Escritores de Ciencia Ficción (SFWA Emergency Medical Fund).
 

Pournelle nació pobre en Louisiana en 1933 y participó en la Guerra de Corea como oficial de artillería. Se sacó después un doctorado en Políticas, teniendo como maestro y mentor a Russell Kirk, una de las grandes figuras del pensamiento conservador norteamericano (que a su vez se convirtió al catolicismo en 1964, con 46 años, inspirado por el estilo de vida conservador de los católicos de islas escocesas). Kirk fue padrino de bautizo de su hijo.
 
En 1963 Pournelle presentó la llamada "tabla Pournelle" de ideologías políticas, con 2 ejes: nivel de estatismo y nivel de racionalismo. El comunismo sería estatismo racionalista, mientras que el nazismo sería estatismo irracionalista. Los anarquistas clásicos serías anti-estatistas irracionales, y Ayn Rand sería anti-estatista ultrarracionalista. Muchos usan esta tabla para salir de la dialéctica izquierda-derecha.


   La tabla Pournelle, tal como la presenta Wikipedia


Pournelle también escribía sobre avances tecnológicos, en revistas y en libros, y de hecho era una de sus principales ocupaciones profesionales. Le gustaba decir que él fue el primer escritor del mundo en haber escrito en un ordenador personal, en 1977, un libro publicado.



Explicaba que la máquina le había costado 12.000 dólares que tuvo que pedir prestados (la mitad para la impresora), pero que valía la pena porque permitía corregir los textos y porque recuperó la inversión pronto. Parece que se refiere al cuento "Espirales" que se publicaría en una antología con Niven. De hecho, Pournelle contagió el uso de la máquina a su colaborador Larry Niven.

 
También era analista político y estratégico, alguno de sus libros sobre estrategia y tecnología se usan todavía en academias militares y se considera que fue uno de los asesores científicos que animaron a Estados Unidos a insistir en "la guerra de las galaxias", la carrera armamentista en el espacio que la Unión Soviética no pudo seguir y que llevó al hundimiento del régimen comunista.
 
En los años 80 y 90 Pournelle desarrollo una amistad y relación intensa con el líder conservador Newt Gingrich (quien se hizo católico en 2009, influido por su esposa Callista y las enseñanzas de Benedicto XVI). Su hijo Richard fue colaborador de Gingrich, Jerry escribió un prefacio para algún libro de Gingrich e incluso tantearon escribir juntos un "thriller de ciencia ficción política".


 

Pournelle y Niven vendieron más de 10 millones de ejemplares de El Martillo de Lucifer, una historia postapocalíptica tras la caída de un meteorito, que demuestra la importancia de la civilización frente a la barbarie, una amenaza que nos espera siempre a la vuelta de la esquina.

Otros tantos millones, o más, vendió con La Paja en el Ojo de Dios, un clásico de 1974. La Paja (o la Mota, en otras traducciones) es un planeta aislado en una esquina galáctica (el Ojo de Dios) con una peculiar raza nativa, los pajeños, que se reproducen descontroladamente tendiendo al colapso cada pocos años. La nave militar terrestre que los descubre -incluyendo a su capellán y su capitán con iconos en su despacho- tendrá que tomar decisiones complejas.
 


También logró muchos lectores con los Jenízaros, unos mercenarios del espacio. En esta saga, una mercenaria queda embarazada y se niega a abortar, como da por supuesto su pareja que tiene que hacer. Hubo críticos literarios que dijeron que no era creíble esa opción provida de la mujer.

Casi todas las novelas de Pournelle han envejecido bien, siguen leyéndose con pasión y enganchan.
 

Pournelle era muy expresivo cuando hablaba de política, bastante menos cuando hablaba de valores morales y sumamente discreto, incluso elusivo, cuando hablaba de religión. En su blog señaló la incoherencia de los que proponen el aborto en unas u otras etapas del desarrollo fetal y no permiten el infanticidio de bebés recién nacidos.
 
Recordaba en su blog Chaos Manor que "las sociedades paganas permitían a los padres dejar a los niños para que mueran, es difícil entender por qué la mayoría de los defensores del aborto lo prohíben, pero de hecho es un crimen en casi todas las jurisdicciones. Si un propósito de la ley es proteger a los inocentes, es difícil imaginar nadie más inocente que un bebé recién nacido o uno capaz de vivir si se le dejara nacer".

 


En otra ocasión criticó las normas de Obama que querían obligar a las universidades católicas a financiar los contraceptivos de sus estudiantes. "Si quedar embarazada es un peligro, la humanidad ha conocido desde la Edad de Bronce, como mínimo, una forma simple de evitar el embarazo: la virginidad, o como la palabra tiene definiciones alternativas, más tecnicamente, las hembras pueden evitar quedar embarazadas evitando el coito con machos.  Este es un método bien conocido que funciona".
 
Y añadía: "¿Cuándo las píldoras anticonceptivas se convirtieron en seguro de salud? ¿Qué enfermedad previenen? ¿Tenemos que pagar el seguro de salud contra ser devorada por tiburones a una que insiste en nadar en aguas infestadas de tiburones? ¿Su seguro de vida ha de incluir normas que no se cubrirán si hace autoestop en la frontera iraní? Por no hablar de la libertad religiosa, lo que significa hacer que una universidad jesuita pague anticoncepción. ¿Cuándo consiguió el Gobierno el derecho de exigir a la gente que pague por la anticoncepción de otros?"
 

En otra ocasión, en 2008, hizo una puntualización al ateo Richard Dawkins, quien criticaba a los defensores del "diseño inteligente" que decían que tras la complejidad que observamos en la vida nadie defiende un "diseño inteligente" de otras razas cósmicas, sino que se usa solo para proponer a Dios, camuflado, como diseñador.
 
Pournelle  le recordó que el astrónomo Sir Fred Hoyle (1915-2001) en su libro "Evolución desde el espacio" defendía "una teoría bastante sofisticada de cómo la evolución podía haber sido influida por extraterrestres que no eran ni dioses ni superseres. Las teorías de Hoyle horrorizaban y horrorizan a los fundamentalistas". Pournelle señalaba que Hoyle daba argumentos complejos contra el "darwinismo por azar" y concluía que "ha sido ignorado, pero al menos no he visto una refutación definitiva de lo que dijo". No era eso lo que él creía, pero pensaba que el ateo Dawkins tenía que afrontar el tema.

 
La mayor parte de sus novelas se inscribían en el ciclo del CoDominium, a lo largo de varios siglos de historia del futuro (con su cronología fantástica y evocativa aquí).
 
En ese mundo, Estados Unidos y la URSS se ponen de acuerdo hacia el año 2000 para repartirse el mundo y unirse en una especie de gran federación mundial, el CoDominium, con el resto de países como meros satélites. En 2009 el CoDominium impide las guerras nacionales en la Tierra. En 2010 descubren planetas habitables y empieza la expansión por el espacio con flotas que salen hacia el 2020.


 El Codominio, una unión de la URSS y EEUU

Precisamente en 2020, el Papa Juan XXVI logra la reunificación de casi todos los cristianos, con muy pocas excepciones, incluyendo algunos puritanos escoceses (que fundarán colonias en el espacio) y carlistas españoles que en el desolado planeta Thurstone crearán la nación de Santiago (y guerrearán contra sus vecinos, con una fea guerra civil en 2079, los "don" contra los "republicanos").

 
Pero el resto de los planetas y la Flota son cristianos papistas, con capellanes militares inteligentes, simpáticos, moderados, buenos científicos y grandes compañeros y camaradas, como se ve en La Paja en el Ojo de Dios. Así, Pournelle huía del cliché del cura anti-ciencia, fanático, asustado por lo desconocido y novedoso o socialmente descolocado. Con todo, la Iglesia no tiene un papel importante en las novelas, que cuentan sobre todo historias de mercenarios.

 
Aunque Pournelle quedó finalista 9 veces en los prestigiosos premios Hugo de ciencia ficción (mediante el voto popular de los socios de la Asociación Mundial de Ciencia Ficción, o sea, la base de aficionados), nunca llegó a ganarlo. Hay quien señala que en la fase final de las votaciones, en la que participan solo asistentes a las convenciones, hay formas de bloquear algunos autores, y que a Pournelle se le bloqueaba por conservador.
 
Curiosamente, sí ganó el Premio Prometeo, de la Asociación Futurista Libertaria, que suele entregarse a autores ateos y militantes de ideología "humanista secular", los que presentan confianza en la humanidad en el futuro. Fue por su novela Ángeles Caídos de 1992, que alaba las posibilidades de la tecnología y critica con humor a los recortes en ciencia e investigación. Fueron co-autores Larry Niven y Michael Flynn, un novelista muy respetuoso con el pensamiento cristiano y su historia, famoso por la novela Eifelheim, en la que unos extraterrestres insectoides naufragados en la Edad Media se hacen católicos y buenos amigos de un pueblo medieval.


 

Quizá las obras más teológicas de Pournelle y su inseparable Larry Niven fueron "Inferno" (1976) y "Escapada del Infierno" (2009), siendo ambas una revisitación irónica pero respetuosa del infierno de la Divina Comedia de Dante. Hay crítica ácida a algunos personajes que se encuentran allí, hay reflexión sobre el sentido del castigo, la necesidad de toamr conciencia del mal cometido, etc... pero tiene más un sentido literario y reflexivo que realmente teológico o espiritual. Con todo, las críticas que recibieron ambas obras fueron sobre todo positivas.