Desde el año 2007, el Monesterio de Poblet (www.poblet.cat), ha reducido cerca del 95% de su consumo de agua gracias a medidas como la implantación de grifos que permiten eliminar las impurezas sin usar el jabón y la instalación de aparatos electromagnéticos que impiden la acumulación de cal en las tuberías.

Los grifos que usan los monjes para su aseo diario se pueden adquirir en el mismo monasterio en un precio de 60 euros y según confirma el prior del monasterio, Lluc Torcal, ya se han vendido más de 600 grifos.

Del mismo modo, Poblet también ha reducido en un 50% su consumo de gasóleo durante los últimos años. Este ahorro ha sido posible gracias a la instalación de sistemas de suelo radiante y de aparatos aerotérmicos -que permiten generar calor gracias a la misma acción del aire- y el mantenimiento de una temperatura estable de 21 grados en la mayoría de instalaciones del monasterio.

La iluminación es también otro de los aspectos que el monasterio cuida para ahorrar energía, ya que las luces exteriores de la entrada son un modelo comprado en Austria que regulan la intensidad de la luz según la actividad y evitan la contaminación lumínica.

“Nuestro objetivo de futuro sería poder desconectarnos totalmente de la red eléctrica y ser autosuficientes”, destaca el prior Lluc Torcal, que sostiene que estas mejoras han permitido el ahorro de energía y, a la vez, mejorar la calidad de vida de los monjes y de las cerca de 120.000 visitas anuales que recibe el centro religioso, uno de los más importantes de la Ruta del Cister.

Estas son algunas de las innovaciones que han podido conocer algunos empresarios de Tarragona que durante estos días asisten a unas jornadas para conocer los mecanismos de eficiencia energética que lleva a cargo el monasterio. Las jornadas, organizadas por la Confederació Empresarial de la Província de Tarragona (www.cepta.es) se repetirán este mes de noviembre.