A mí, sacerdote hoy, me han ayudado a lo largo de mi vida muchos sacerdotes. Los que me enseñaron el catecismo y me administraron los primeros sacramentos. Los que me alentaron en mi vocación sacerdotal. Los que me formaron en el Seminario. Los compañeros con los que he trabajado, y trabajo. Los que me alentaron en los momentos dificiles. Los que han tenido la caridad de alegrarse en los momentos más bonitos. Los que siguen ayudándome ahora para intentar ser fiel en mi camino de entrega a Dios y a los demás... Son muchos, y a todos doy las gracias.

¿Sería mucho pedir que los lectores tuvieran el detalle de agradecer algo en concreto a algún sacerdote que, como buen samaritano, les atendió en algún momento crucial? Cuentalo, nos hará mucho bien a todos. Y si no lo cuentas, al menos reza por nosotros.
En este video tenemos un ejemplo:

https://www.youtube.com/watch?v=15wbM0eAG8U&feature=player_embedded

Muchas gracias, y ya sabes que puedes contar con nosotros. Tambien nosotros contamos con tigo.

Juan García Inza
juan.garciainza@gmil.com