Año del Señor 2024 

18 de enero
 
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día. 
 
DAMOS LO QUE CULTIVAMOS
 
Ayer tenía que cocinar carne, y la hermana procuradora me proporcionó unas zanahorias como guarnición. Son de unos monjes muy cercanos que comparten con nosotras los frutos de su huerto.
 
Cuando las vi, aluciné. Eran enormes... incluso saqué una del supermercado para compararla. Y luego, claro, en el sabor se notaba un montón. ¡Eran buenísimas!
 
Así que mientras cocinaba, le daba gracias al Señor por la generosidad de estos hermanos. Y comprendí que cada uno de nosotros comparte con los demás lo que cultiva. Y es que eso es el amor: dar al otro lo que cuidas y cultivas en tu corazón.
 
Nosotros no podemos hacerlo crecer. Eso es lo que obra el Señor en cada uno, pero sí podemos cultivarlo, cuidarlo, cavar nuestra tierra para que dé más fruto...
 
Y claro, dependiendo de lo que dejemos que brote en nosotros, en esa misma medida será nuestro amor. En la medida en que dejamos que crezca el Amor del Señor en nosotros, en la medida en que le dejamos que vaya sanando nuestra tierra, nuestro amor será más gratuito, más auténtico, más Amor de Dios.
 
Porque si queremos dar frutos del Amor de Dios, necesitamos que Su semilla sea plantada en nosotros, y de ahí brote en nuestra vida Su Amor para los demás.
 
Hoy el reto del amor es pedirle al Señor que haga brotar en ti Su Amor. "Tanto amó Dios al mundo que entregó a Su Hijo único" (Jn 3, 16). Cristo es la semilla que Dios ha plantado en nosotros, para que nuestra vida dé fruto abundante, el bueno, el mejor. ¿Lo acoges?
 
VIVE DE CRISTO
 
¡Feliz día!