La Academia de Líderes Católicos (ALC) nació en Chile en el año 2006 para formar líderes católicos a partir de los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, para participar en el ámbito social, político y económico.

Este año ha implantado por primera vez su metodología para formar jóvenes en Uruguay, con mucho el país más laicista de Hispanoamérica.

Poco más del 40% de los uruguayos se definen como católicos. En este pequeño país que no llega a los 4 millones de habitantes, en el calendario de festivos han eliminado las fiestas religiosas pues no reconoce la Navidad o la Semana Santa, a las que denomina con otros nombres para ocultar su sentido religioso. Legalizó el divorcio en 1907 (en 1913 a petición de la mujer), en 2012 legalizó el aborto y en 2013 el matrimonio homosexual.

En este contexto la Arquidiócesis de Montevideo y la Academia de Líderes Católicos organizaron desde agosto un curso de liderazgo para jóvenes con el lema “Formar para servir”.

Desde el 4 de agosto, más de 25 jóvenes asistieron cada sábado al curso de formación integral en liderazgo, que finalizó con la certificación de la Academia Internacional de Líderes Católicos el 24 de noviembre en el anfiteatro del Club Católico.

La ceremonia fue presidida por el Arzobispo de Montevideo, Cardenal Daniel Sturla; el director general de la Academia Internacional de Líderes Católicos, José Antonio Rosas; el vicepresidente del Directorio de la Academia Internacional de Líderes Católicos, Luis Cordero Barrera; y el director de la Academia de Líderes Católicos Uruguay, P. Matías Soiza.

Los católicos, aunque seamos pocos, tenemos la obligación de ser levadura, fermento en la masa. Lo que no podemos hacer es diluirnos sin dejar la Palabra, la luz del Evangelio”, afirmó el Cardenal Sturla. “Uruguay necesita, como todas las sociedades del mundo, a Cristo. Él es camino, verdad y vida. Pero al mismo tiempo nos dice a nosotros ‘ustedes son sal de la tierra y luz del mundo’”, exhortó el Arzobispo de Montevideo.

En representación de los recién graduados, Mathías Silveira expresó que “la academia nos permitió descubrir los dones de Dios en nosotros y en nuestros compañeros”,

Como muestra del compromiso con la Iglesia en su país, los jóvenes recibieron el libro “Desde la matriz: 400 años de presencia y servicio de la Iglesia en Uruguay” y un rosario que les recordará la importancia de la oración y de la intercesión de la Virgen María. Para conocer más de la Academia de Líderes Católicos Uruguay visite su web Lideres Católicos