Este domingo 16 de julio acudieron más de 7 millones de venezolanos a votar a una consulta popular, ilegal según el régimen de Nicolás Maduro, pero con urnas en más de 2.000 puntos de participación en el país, incluyendo muchos templos e iglesias que la autoridad eclesiástica prestó para el evento popular. 

Se trata de una votación con fuerte carga simbólica, tras cien días de movilizaciones y protestantes que han causado al menos 94 víctimas a manos de las fuerzas militares y de policía, según fuentes de la oposición. Han participado en la consulta, como observadores internacionales, 
expresidentes latinoamericanos como el mexicano Vicente Fox o el boliviano Jorge Quiroga.


La Iglesia venezolana no solo participó prestando espacios sino que a través de la cuenta de Twitter de la Conferencia Episcopal se animó a participar en el voto. 

El cardenal arzobispo de Caracas, Jorge Urosa, fue de los primeros en acercarse a las urnas: votó a los 9 de la mañana y animó a los venezolanos a participar en los que calificó como proceso democrático. Instó a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado a garantizar una votación libre y frenar todo episodio de violencia durante la jornada.

Urosa sin embargo sufrió un episodio de violencia junto con muchas personas tras un acto de culto en una iglesia en el mismo día.  Él y otras 200 personas quedaron encerrados en la iglesia de El Carmen, rodeados por una multitud de los llamados "colectivos", que son paramilitares agresivos de ideología chavista al servicio del Gobierno de Nicolás Maduro y de la "revolución bolivariana". 

Se celebraba la fiesta de la Virgen del Carmen, y el cardenal presidía una misa en la iglesia de esta advocación en Catia, Caracas. Los hechos ocurrieron después de la celebración. El párroco de la Iglesia del Carmen explicó que “se estaba llevando bastante bien el proceso de votación. Era descomunal el gentío que venía de Catia. Había una fiesta por este hecho de poderse expresar”.


Lamentablemente, prosiguió, y “bajo la mirada complaciente de la guardia nacional y la policía nacional comenzaron a disparar. Falleció una persona, dejaron varios heridos”.

Los disparos obligaron a muchos a entrar al templo y para poder lograr su salida segura intervino el Arzobispo de Caracas. “Ya hemos sacado a toda la gente de la Iglesia. El Señor Cardenal no se quiso ir hasta que salieran todos los que estaban”, indicó el párroco. “Estos son ya los abusos finales de este régimen”, concluyó el sacerdote. 


Alrededor de las 4:30 p.m., dice por su parte el sacerdote P. Víctor Salomón, “se apersonó el subinspector de la policía nacional bolivariana y medió con los colectivos, logrando una segura evacuación de todos los fieles. El señor cardenal agradeció la participación de las autoridades”.

A través de su cuenta de twitter, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) informó que el Cardenal Urosa logró “salir de la Iglesia El Carmen y se encuentra resguardado fuera de peligro”.


El presidente de la Conferencia Episcopal de Venezuela, Diego Padrón, también acudió a las urnas en Cumaná y llamó a los venezolanos a participar, en la misma línea que ya lo hiciera tras la Asamblea Plenaria de los obispos, cuando dio total legitimidad de la consulta. “La consideramos constitucional y pacífica”, manifestó el arzobispo de Cumaná. El cardenal Baltazar Porras, por su parte, votó en la mesa situada en el sector El Llano, perteneciente a su diócesis de Mérida.


Desde Roma, este domingo el Papa Francisco recordó a los venezolanos en su oración pública y aseguró sus oraciones por todo el país después de rezar el Ángelus desde la ventana del Palacio Apostólico: “Dirijo un saludo especial a la comunidad católica venezolana, renovando la oración por vuestro amado país”, dijo el Pontífice, que no mencionó la consulta en el país pero sí hizo recaer la mirada mediática sobre esa nación.

Desde hace meses Venezuela vive una situación crítica. A la falta de alimentos y otros productos básicos, como medicamentos, se une la represión que el gobierno de Maduro contra aquellos que protestan por esta situación.