En México el coronavirus ha infectado a 634.000 personas y ha causado la muerte a 67.500, a fecha de 7 de septiembre. De estas víctimas, casi 90 son clérigos o religiosos de la Iglesia Católica.

Según el último informe del Centro Católico Multimedial (CCM), que realiza la contabilidad de clérigos que mueren por coronavirus en el país, los fallecidos han sido, desde el inicio de la pandemia al 4 de septiembre:

- 77 sacerdotes,
- 7 diáconos permanentes
- 4 religiosas.

Las víctimas son aquellas que han fallecido por complicaciones asociadas al virus. Como en el resto de la población, la mayoría de los fallecidos son personas de edad avanzada y con patologías previas que se complican con el COVID-19, pero también hay algunos muertos más jóvenes. Así, el sacerdote Vicente Castillo Deonate de la diócesis de Puebla, falleció recientemente con tan sólo 35 años. Había sido ordenado en 2012. 

La diócesis más afectada sigue siendo la de Puebla (5 millones de habitantes, atendidos por 550 sacerdotes), que cuenta con un total de 13 sacerdotes fallecidos (3 de ellos en la segunda mitad de agosto).

El seguimiento de religiosos infectados con Covid19 arrojó hasta este momento que en 11 arquidiócesis del país ha habido defunciones de religiosos, mientras que en 8 más no se han reportado muertes por ésta causa.

Campaña para donar comidas: 191.000 donadas

El pasado 12 de abril, casi al principio de la pandemia en México, la Conferencia Episcopal puso en marcha la iniciativa Familias Sin Hambre, con el programa Cadena Solidaria de Alimentos y Medicinas y la web de donativos Donadespensas.mx, ligada al teléfono 800 CARITAS.

Después, el mismo número (800 CARITAS) fue habilitado como Centro de Escucha y Apoyo Emocional para quienes sufren los efectos de la pandemia en México, a través de los equipos de la Arquidiócesis de México y de la Dimensión Episcopal de Fe y Compromiso Social.

Esta campaña había entregado (a fecha 25 de agoso) 191.000 "despensas" (lotes de comida que se entregan luego a través de Cáritas y las parroquias), cada una de ellas valorada en 20 pesos mexicanos (8 euros).