Los obispos de América Latina son conscientes de la grave situación de represión que vive Nicaragua, y como el gobierno de Daniel Ortega, con sus grupos paramilitares, han colocado como uno de sus principales objetivos a la Iglesia Católica, que no ha dudado en denunciar la situación de violencia.

El cardenal de Managua y el Nuncio han llegado a ser perseguidos y agredidos, otro obispo fue tiroteado al salir de misa y debió refugiarse en una vivienda cercana. Numerosos templos han sufrido ataques y tiroteos, e incluso en su interior se han provocado muertes.

Por ello, el CELAM (Consejo Episcopal Latinoamericano) ha publicado una carta de apoyo a Nicaragua y a sus obispos. Además, informa que para este domingo 22 de julio “pedimos en todas nuestras celebraciones, en todas las comunidades creyentes de todos nuestros países, se eleve una oración especial por el pueblo de Nicaragua”.

En el comunicado, los obispos expresan su “cercanía y solidaridad con el pueblo nicaragüense y con sus pastores profetas de justicia, ante la dramática y dolorosa crisis social y política que se vive actualmente”.

Dirigiéndose a sus compañeros obispos, la nota prosigue: “Les alentamos a seguir siendo defensores de los derechos humanos y portadores de la esperanza. Les invitamos también a no cerrar los oídos ante el clamor y sufrimiento de nuestros pueblos y a continuar siendo los líderes valerosos por medio de los cuales Dios se hace presente y guía la historia de su pueblo”.

 

Carta íntegra emitida por el CELAM

Los Obispos de América Latina y El Caribe, como servidores del Evangelio de Jesucristo para la esperanza del mundo, expresamos nuestra cercanía y solidaridad con el pueblo Nicaragüense y con sus pastores profetas de justicia, ante la dramática y dolorosa crisis social y política que allí se vive actualmente.
“He visto cómo sufre mi pueblo” Éxodo 3,7

Ante esta grave situación, estamos llamados a ser la voz de quien no tiene voz, para hacer valer sus derechos, encontrar caminos de diálogo e instaurar la justicia y la paz, “para que en Cristo, todos tengan vida” (cfr. Documento de Aparecida 4); de modo especial, quienes se sienten desconsolados por la muerte y la violencia. Les alentamos a seguir siendo defensores de los derechos humanos y portadores de la esperanza.

“No te dejes vencer por el mal.

Al contrario, vence con el bien el mal” Romanos 12, 21

Les invitamos también a no cerrar los oídos ante el clamor y sufrimiento de nuestros pueblos y a continuar siendo los líderes valerosos por medio de los cuales Dios se hace presente y guía la historia de su pueblo.

El próximo domingo 22 de julio, es nuestro deseo y pedimos en todas nuestras celebraciones, en todas las comunidades creyentes de todos nuestros países, se eleve una oración especial por el Pueblo de Nicaragua.

¡Que la Inmaculada Concepción de María nos devuelva la paz y la alegría!

 En nombre del Episcopado de América Latina y El Caribe.

† Card. Rubén Salazar Gómez, Arzobispo de Bogotá y Primado de Colombia    Presidente del CELAM                                                                   

† Juan Espinoza Jiménez, Obispo Auxiliar de Morelia, México Secretario General del CELAM 

Bogotá, D. C., a los 18 días del mes de julio de 2018