Católicos y evangélicos desfilaron por separado celebrando el Día Nacional de la Biblia, instituido mediante decreto legislativo en la administración de José Simón Azcona, evento que se realiza cada último domingo del mes de septiembre.

[Honduras es el único país hispano que lo celebra como fiesta por un decreto civil estatal de 1987. Nota de ReL]

El desfile de los católicos fue más discreto, saliendo desde el parque Centenario, con rumbo a la Universidad Católica Nuestra Señora de la Paz, donde concluye con una misa como parte del ritual católico. Este desfile fue encabezado por niños, seguido de los diferentes movimientos al interior de la Iglesia Católica.



Los evangélicos por su parte, en un impresionante desfile que inicia en el barrio La Reforma para culminar en el estadio Marcelo Tinoco. Aquí realizan los actos protocolarios leyendo el decreto ley que consagra en Día Nacional de la Biblia y la entonación del Himno Nacional.

Las gradas del estadio resultaron insuficientes para albergar a la multitud de cristianos evangélicos que con cánticos y portando pancartas con mensajes bíblicos dan una muestra de fuerza.



Centenares de niños vistiendo atuendos que semejaban los personajes y héroes de la Biblia marchaban junto a sus padres con mensajes como el siguiente: “Instruye al niño en su camino y aún cuando fuere viejo no se apartará de él. Lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera a mi camino, y no me avergüenzo del Evangelio porque es poder de Dios para salvación”.

Como es costumbre entre los evangélicos en actos de esta índole, los cánticos espirituales ocupan un lugar aparte como una especie de tributo y alabanza a Dios.



"Somos portadores de un mensaje de paz; la paz que solo Cristo ofrece a la humanidad y más ahora que el mundo y Honduras viven las peores crisis de la historia en un clima de violencia que sacude los cimientos de la sociedad y la Iglesia", expresaron los organizadores del evento.

Según cálculos estimados por los que manejan el estadio el aforo en graderías es de 5.000 personas, pero esta vez la concurrencia superó esa cifra.