Aborto, mentiras y manipulación
Pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo, y parece que ha llegado la hora en España de revertir la deriva abortista en la que llevábamos casi treinta años inmersos
por Antonio Torres
El portavoz del PP se ha sumado en declaraciones a la SER, a la postura sostenida por el PSOE ante el caso de la salvadoreña "Beatriz", obviando las mentiras que se han desvelado sobre el caso y exigiendo que se le permitiera abortar, con absoluta desconsideración de las manifestaciones realizadas por importantes instituciones salvadoreñas, incluida la Corte Suprema de Justicia de aquel país.
Una mentira perpetrada en 1970 fue el origen de la legalización del aborto en los EEUU. Las abogadas de Norma McCorvey, a quien habían previamente convencido que abortara a su hijo en lugar de darlo en adopción, alegaron que había sido reiteradamente violada, llegando el caso finalmente al Tribunal Supremo y legalizándose el aborto en todos los estados de la Unión en 1973. Diecisiete años después McCorvey reconocía que todo había sido mentira. Las abogadas terminaron reconociendo también que habían mentido, y que la revista Playboy había financiado los gastos del proceso. Se trata del famoso caso Roe vs. Wade.
Otra mentira perpetrada en la misma fecha, el caso Does vs. Bolton, fue la estratagema legal que impulso al Tribunal a autorizar el establecimiento de 2.200 abortorios en los EEUU. En este caso fueron los servicios de ayuda legal quienes utilizaron a Sandra Cano que, no obstante haberse negado a abortar a uno de sus hijos, fue espuriamente utilizada por los abogados en su plan de legalizar el aborto libre. En los dos casos, las dos madres terminaron teniendo a sus hijos y dándolos en adopción.
Ahora, tratan los proabortistas utilizar en España el caso de la salvadoreña "Beatriz", una mujer que nadie ha visto todavía pero que sí ha declarado, ante la Corte Suprema de Justicia de El Salvador, que nunca ha querido que le practiquen un aborto, no obstante la anencefalia de su hijo y la enfermedad autoinmune que ella misma padece. Ha sido instrumentalizada y engañada por dos abogados, pertenecientes a una llamada Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto Terapéutico, Ético y Eugenésico, con considerables apoyos desde los EEUU por parte de Amnistía Internacional, Human Rights Watch y Women´s Linnk, misma que hace poco promovió sin éxito la legalización del aborto en Colombia. "Beatriz" no abortará y, por supuesto, su vida no habrá sido puesta en ninguna en situación de peligro.
La mentira, los montajes sentimentaloides, la instrumentalización de madres vulnerables inmersas en una situación dolorosa y problemática, el pago en muchas ocasiones de importantes cantidades de dinero a políticos y periodistas, son las estratagemas que de siempre han utilizado los adalides de la cultura de la muerte, para llevar a cabo sus planes de legalización del aborto en el mundo entero. Los proabortistas, carentes de argumentos que puedan justificar, desde un punto de vista intelectual y moral, la muerte de seres humanos en el mismo vientre de sus madres, nunca han tenido escrúpulos de tipo alguno a la hora de perpetrar o tratar de perpetrar sus iniquidades.
Pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo, y parece que ha llegado la hora en España de revertir la deriva abortista en la que llevábamos casi treinta años inmersos, -con un número de víctimas que alcanzan los dos millones de seres humanos y el dolor de la inmensa mayoría de sus madres-, desvelando desde la razón y los hechos las mentiras y la burda manipulación de la realidad de quienes todavía no han alcanzado a comprender la inviolable dignidad del ser humano sin excepciones y en todo momento de su biografía.
Antonio Torres
Presidente Fundación RedMadre
Una mentira perpetrada en 1970 fue el origen de la legalización del aborto en los EEUU. Las abogadas de Norma McCorvey, a quien habían previamente convencido que abortara a su hijo en lugar de darlo en adopción, alegaron que había sido reiteradamente violada, llegando el caso finalmente al Tribunal Supremo y legalizándose el aborto en todos los estados de la Unión en 1973. Diecisiete años después McCorvey reconocía que todo había sido mentira. Las abogadas terminaron reconociendo también que habían mentido, y que la revista Playboy había financiado los gastos del proceso. Se trata del famoso caso Roe vs. Wade.
Otra mentira perpetrada en la misma fecha, el caso Does vs. Bolton, fue la estratagema legal que impulso al Tribunal a autorizar el establecimiento de 2.200 abortorios en los EEUU. En este caso fueron los servicios de ayuda legal quienes utilizaron a Sandra Cano que, no obstante haberse negado a abortar a uno de sus hijos, fue espuriamente utilizada por los abogados en su plan de legalizar el aborto libre. En los dos casos, las dos madres terminaron teniendo a sus hijos y dándolos en adopción.
Ahora, tratan los proabortistas utilizar en España el caso de la salvadoreña "Beatriz", una mujer que nadie ha visto todavía pero que sí ha declarado, ante la Corte Suprema de Justicia de El Salvador, que nunca ha querido que le practiquen un aborto, no obstante la anencefalia de su hijo y la enfermedad autoinmune que ella misma padece. Ha sido instrumentalizada y engañada por dos abogados, pertenecientes a una llamada Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto Terapéutico, Ético y Eugenésico, con considerables apoyos desde los EEUU por parte de Amnistía Internacional, Human Rights Watch y Women´s Linnk, misma que hace poco promovió sin éxito la legalización del aborto en Colombia. "Beatriz" no abortará y, por supuesto, su vida no habrá sido puesta en ninguna en situación de peligro.
La mentira, los montajes sentimentaloides, la instrumentalización de madres vulnerables inmersas en una situación dolorosa y problemática, el pago en muchas ocasiones de importantes cantidades de dinero a políticos y periodistas, son las estratagemas que de siempre han utilizado los adalides de la cultura de la muerte, para llevar a cabo sus planes de legalización del aborto en el mundo entero. Los proabortistas, carentes de argumentos que puedan justificar, desde un punto de vista intelectual y moral, la muerte de seres humanos en el mismo vientre de sus madres, nunca han tenido escrúpulos de tipo alguno a la hora de perpetrar o tratar de perpetrar sus iniquidades.
Pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo, y parece que ha llegado la hora en España de revertir la deriva abortista en la que llevábamos casi treinta años inmersos, -con un número de víctimas que alcanzan los dos millones de seres humanos y el dolor de la inmensa mayoría de sus madres-, desvelando desde la razón y los hechos las mentiras y la burda manipulación de la realidad de quienes todavía no han alcanzado a comprender la inviolable dignidad del ser humano sin excepciones y en todo momento de su biografía.
Antonio Torres
Presidente Fundación RedMadre
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