Viernes, 17 de mayo de 2024

Religión en Libertad

Blog

Antífona de comunión C-DV.2/Juan 8,10s

por Alfonso G. Nuño

Mujer, ¿ninguno te ha condenado? Ninguno, Señor. Tampoco yo te condeno. Anda, y en adelante no peques más (Jn 8,10s).
Quien se acerca a comulgar no ha de estar en pecado mortal, pero con todo es un pecador y siempre va arrastrando, al menos, siete pecadillos al día. Esta situación nos la recuerda Jesús en la Eucaristía. En ella, nos encontramos con la santidad absoluta y, en contraste, nos descubrimos como mujer adultera; ser pecador es ser infiel al único amor.

Este encuentro eucarístico con el Señor nos descubre también que Él es el único juez. Los demás, como mucho, acusan –eso es a lo que se dedica Satán, el Diablo–, pero no pueden condenar. El único que puede tampoco lo hace. Quien comulga se encuentra con su misericordia. Y quien no se acerca, por no poder, al escuchar esta antífona recuerda que ese perdón del misterio pascual lo encuentra en el sacramento de la reconciliación.

Y la Eucaristía es también envío. El camino continúa, hay que seguir adelante. Jesús me dice que no peque más. ¿Y qué es eso? ¿Es vivir solamente evitando determinadas conductas? Únicamente hay una manera de no pecar, que es amando a Dios sobre todas las cosas y en ese mismo amor a los demás. En la Eucaristía, el Amor, amándome, me envía a amar con su amor.
Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda