Jueves, 28 de marzo de 2024

Religión en Libertad

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Monjas Jerónimas

Monasterio del Corpus Christi

por Caminando por Madrid

En la plaza del Conde de Miranda 3, en el centro del Madrid de los Austrias voy a visitar -junto a mi amiga y también periodista Carmen Imbert- el primer Monasterio de lo que quiere ser un reto: recorrer todos los Monasterios y Conventos de clausura de la ciudad de Madrid, aprender algo de su historia, disfrutar de sus dulces y artesanías y compartirlo con todos aquellos que lean estas crónicas.

He elegido este primer Convento por estar situado muy céntrico, por el interés que despierta entre los turistas -tal y como nos confirma más tarde la Madre Superiora- y también porque, varias veces, he acudido en familia a celebrar en su iglesia los Oficios de Semana Santa: Jueves y Viernes Santo, y la Vigilia Pascual, de la cual tengo un “dulce recuerdo” pues las Monjas Jerónimas que viven allí, en algunas ocasiones, nos han invitado -tras la Vigilia Pascual- a tomar vino dulce con sus famosas pastas.

En esta ocasión, nada más llegar, nos dirigimos a la puerta que queda a la derecha de la principal que da acceso a la iglesia. Esta puerta secundaria -un gran portalón- ya en la calle del Codo es la que -tras pasar varios patios interiores- termina en el “torno” donde las monjas venden sus pastas. No es la primera vez que vemos un “torno” pero, pienso, para un turista extranjero o para una persona que nunca lo haya visto, ¡ver y usar un torno es toda una experiencia!

El “torno” es una estructura giratoria de madera muy característica de los Conventos de clausura. Sirve para pasar objetos del interior al exterior, sin que se vean las personas que los dan y los reciben. En primer lugar, la persona que viene del exterior ha de llamar a una campanilla o timbre situado junto al torno. A continuación, desde dentro, la “hermana tornera” contestará diciendo: “Ave María Purísima”, a lo que hay que responder: “Sin pecado concebida”. De este modo, se inicia el diálogo.

Al decir que somos dos periodistas, la hermana tornera nos pide que esperemos a la Madre Superiora en el “locutorio”. Los “locutorios” son también espacios especiales -normalmente con una reja- preparados para favorecer el diálogo entre los que venimos del “mundanal ruido” y las monjas de clausura. En este caso, el locutorio es una sala de estar sencilla pero muy acogedora, con una reja de hierro, que comunica con una habitación alargada con una decena de sillas de madera.

En seguida llega la Madre Superiora, Sor María del Espíritu Santo. Aunque camina trabajosamente, con muletas -luego, ante nuestras preguntas, nos reconoce que tiene grandes dificultades para moverse-, nos recibe con mucha alegría y cariño. No nos conoce de nada y, sin embargo, lo primero que hace es -a través de la reja- cogernos de la mano y besárnosla.

Es una mujer ya mayor -más de 80 años- y transmite una alegría y buen humor que da gusto estar con ella. Le cuento el proyecto y se muestra muy interesada. Nos dice que, en su caso, “están deseando que la gente conozca lo bonita que es su vida”. “La oración, la lectura y estudio de la Biblia, la celebración cantada de la Liturgia de las Horas, la alabanza divina y el trabajo son los fundamentos de nuestra vida”.

Actualmente, en este Monasterio del Corpus Christi viven siete monjas -de edades comprendidas entre 50 y 89 años- y pertenecen a la Orden de San Jerónimo, Orden fundada en la Península Ibérica en el siglo XIV, con el deseo de seguir las enseñanzas de San Jerónimo y Santa Paula, santos del siglo IV d.C.

Llevan una vida de comunidad -nos explica- en clausura, pero en absoluto aisladas o lejos de la vida real. De hecho y ante la falta de monjas externas, cuentan con muchos colaboradores que les ayudan en las tareas que ellas no dominan como, por ejemplo, llevar al día sus obligaciones fiscales a través de internet o el mantenimiento de los edificios que componen el Monasterio, etc.

Mientras charlamos, caigo en la cuenta de que un dulce olor a anís impregna todas las estancias del lugar. Le preguntamos a Sor María del Espíritu Santo y nos lo confirma. Ese “dulce olor” atrae a decenas de turistas al Monasterio y casi todos los días agotan las pastas y los dulces que ellas mismas elaboran. “Somos muy buenas cocineras -asegura-. Hacemos naranjines, pastas de té, pastas de almendra, sequillos, nevaditos, mantecados de jerez, mantecados de yema… y las materias primas que utilizamos son de primera calidad”.

Como se hace tarde, nos despedimos no sin antes quedar en vernos de nuevo para enseñarle la “crónica de la visita” y, rápidamente, nos dirigimos hacia la iglesia para visitarla. La fachada es de ladrillo y austera. El interior invita al recogimiento y a la oración. Nos fijamos principalmente en dos obras de arte (que en varios blogs de información turística hemos visto recomendadas): en el altar mayor, en el gran lienzo de la Última Cena de Vicente Carducho, pintor de la corte de Felipe III, que destaca por ser de una de las pocas representaciones de la Última Cena en formato vertical.

Y, la segunda obra, en la pared izquierda de la iglesia, el cuadro de la “Virgen Carbonera” que da el nombre popular a estas Monjas Jerónimas: “Las Carboneras”. Este lienzo representa a la Virgen María como “Inmaculada” y -según cuentan- apareció misteriosamente en una carbonería en 1647, lo que generó en su momento una gran devoción popular.

Están a punto de cerrar la iglesia y nos despedimos del Señor que está en el Sagrario. En nuestros bolsos llevamos los apuntes que hemos tomado de la visita, el libro “Monasterio del Corpus Christi. Las Carboneras” que se ha editado con motivo del IV Centenario de la fundación del Convento (se puede adquirir allí mismo. Autor: D. Vicente Benítez Blanco. Precio: 20€). ¡Y una buena caja de mantecados de yema que nos comeremos con gusto acompañados de un buen café!

Datos de interés:
Monasterio del Corpus Christi
Plaza del Conde de Miranda 3. Madrid 28005. Tel. 91 548 37 01
Página facebook: https://www.facebook.com/jeronimasmadrid/
Horarios de misas: Días laborables, domingos y festivos: 13h y 19h.
Horarios de apertura de la iglesia: 8,30h a 13,30h. y 16,30h a 19,30h.
Horarios del torno: 9,30h a 13h. y 16,30h a 18,30h.
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