Jueves, 28 de marzo de 2024

Religión en Libertad

Blog

Delante del belén

por Guillermo Urbizu


Menudo bullicio y juegos. Restos de briznas de hierba y heno. Parpadean algunas luces, otras no. Centelleo. Luces de colores y la estrella con su cabellera de plata. Como el río, donde se afana una mujer que lava, y la natación de una familia de patos, blancos como la nieve de corcho. Allá arriba el molino, y una vaca a la que ordeña una muchacha, y un grupo de pastores -son cinco- alrededor de una hoguera que arde muy roja. Les acompaña el rumor de unos ángeles y unos cántaros y lo que cuentan las historias que pasan de padres a hijos. No muy lejos unas casas de cartón y barro, con esas sencillas cortinas de trapo. Esas casas que se encienden, como se enciende el alma, contemplando. Los Reyes Magos caminan despacio y callados, con sus túnicas y turbantes y coronas, con los rostros radiantes y sabios, en una comitiva donde se ha quedado rezagado un camello. ¡Cuántos brillos de almas y de luces! Deambulan las gallinas y una gran variedad de ovejas, que se caen o se ponen a jugar con los primeros niños que encuentran. Los pastores no les quitan ojo. Y las toman en brazos o se las suben a los hombros. Yo rezo, espectador de todo esto. Y miro las dos palmeras y un pozo. Y pienso en el nombre de Jesús, y en el significado de lo que va a ocurrir dentro de unos días. Soy testigo de la vida de hombres y de mujeres, que en medio de sus labores acogerán a Dios. No pocos lo dejarán todo para ir a verle. Dios llama, urge. En la cueva, engalanada de pobreza, está María, que se ocupa de preparar las cosas, de acondicionar su corazón y el nuestro. José va y viene, preocupado… Supongo intenta conseguir algo de comida y unas mantas. Curiosos se acercan niños y mayores. Y yo, que no dejo de mirar a unos y a otros. ¿Puedo ayudar en algo? Hay una luz naranja ahí dentro, y un buey y una mula. Aprendo. Son personas humildes las que merodean, las que primero intuyen que Dios está cerca. Y hablan con espontaneidad, con inocencia. María sonríe y no se queja. ¿Qué sería del hombre sin Belén? ¿Qué sería de mí sin estas figuras que me revelan el amor de Dios? El nacimiento es representación de la misericordia divina. Hontanar y principio. Salvación. Y un lugar donde encontrar la paz del corazón, que andaba perdida. 
Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda