Jueves, 25 de abril de 2024

Religión en Libertad

Blog

La cosa iba descaradamente contra el Papa

por Alberto Royo Mejia

Se ha publicado un estudio estadístico muy interesante en Estados Unidos de tema sociológico-religioso, y no lo ha hecho nadie relacionado con la Iglesia, sino una institución neutral dedicada a hacer encuestas y estudios de estadística, la Pew Research Center por the People and the Press. Estos señores han hecho un trabajo de comparación entre los casos de abusos sexuales a menores por parte de clérigos católicos aparecidos en la prensa en 2002 -año en que surgieron las primeras noticias de forma masiva y que tuvo su detonante en Boston- y los aparecidos en 2010 -año de la nueva oleada de noticias, con su detonante en Irlanda y Alemania-, y los resultados son muy iluminadores.

 

¿Iluminadores de qué? Pues de lo que ya sospechábamos, esto es, que detrás de la gran parte de las noticias había una mano negra. No es que no haya habido abusos deleznables, pero el tiempo en que han salido a la luz y el modo de hacerlo tenían una intención por detrás, más bien alejada del laudable y honestísimo deseo de informar y por el contrario cercana al anticatolicismo, anticristianismo, anticlericalismo, o lo que fuera, pero sin duda algo de eso. ¿Quién estaba detrás? Probablemente lo sepan solamente el Padre eterno y los que lo hicieron, nosotros solamente podemos hacer conjeturas e imaginar que habrán sido los de siempre…

 

Yendo a los resultados de este instituto de investigación no relacionado con la Iglesia, vemos que, en las noticias de la prensa del año 2002 prácticamente no se hizo alusión a la Santa Sede, ni mucho menos al Papa Juan Pablo II, ni al entonces Cardenal Ratzinger, sino a los obispos de las diócesis que habían gestionado mal los casos de abusos, con el resultado que más del 70 % de los encuestados entonces afirmaron que la Santa Sede había actuado correctamente en el modo de afrontar el problema.

 

Sin embargo otro gallo muy diferente ha cantado en el 2010, en el boom de noticias que se ha concentrado en marzo y abril: El estudio demuestra que la mayoría de las noticias aparecidas en los medios de comunicación (sobre todo en Europa) responsabilizaba de los abusos directa o indirectamente a la Santa Sede, y muy concretamente a Benedicto XVI, sea como Papa o como Prefecto de la Doctrina de la Fe. Los primeros resultados de dicha campaña fueron apabullantes: En un principio, la gran mayoría de los entrevistados, sea en uno sea en otro continente, fue el afirmar que el Papa no había actuado bien ante los abusos, antes y después de ser elegido Sumo Pontífice. Concretamente en Estados Unidos, su popularidad bajó de modo dramático, cosa que no había ocurrido en el 2002.

 

Como antes o después la gente piensa por sí misma -mal que le pese a algunos medios de comunicación-, muchos se dieron cuenta que no era justa esta campaña y, reconociendo la perversidad de los abusos de menores (vengan de quien vengan), no aceptaron el silogismo que de modo forzado y falaz llevaba a responsabilizar a Joseph Ratzinger de algo que ni se había comido ni se había bebido, por lo que su popularidad volvió a crecer, en algunos sitios más rápidamente y en otros menos, según la visceralidad de la prensa local.

 

¿Porqué tal diferencia entre ambas campañas mediáticas? Tratando de evitar extremismos que no llevan a ningún lado, hay algunas cosas que me parecen claras: No es casualidad que la primera campaña venga de América del Norte y la segunda de Europa, pues ello le daba a ésta un tono más anticlerical. Ambas coincidieron en el New York Times cebándose en el tema de modo descarado, pero es también verdad que en la segunda campaña todo olía a palmaria ideologización de las noticias. Por lo menos, ésta era más evidente, la primera campaña fue más discreta, mezclaba más prudentemente las verdades con las conjeturas, mientras que la segunda acumulaba conjeturas que no tenían base en la realidad.

 

La primera campaña impresionó a todos porque descubrió una realidad deplorable, que nunca debería haber ocurrido, y que no era conocida. La segunda mezclaba noticias locales -sobre todo europeas- que tampoco eran conocidas con conjeturas que añadían una gran cantidad de morbo. No es lo mismo que un obispo haya metido la pata con un par de casos o que sea el Prefecto de la Doctrina de la Fe que desde su palacio vaticano organice una intriga para ocultar la totalidad de los casos del orbe católico. El grado de negatividad que se ha transmitido en esta última campaña ha sido mucho más grande, lo que ha servido para confirmar en su postura a los anticlericales europeos, que florecen como las amapolas del campo tras campañas de este tipo. Y todo esto, en un contexto que no podía fallar: El del Año Sacerdotal.

 

Y todo esto, en, sin embargo, de modo misterioso, el Señor ha usado todo esto para hacer un bien: el purificar a la Iglesia, que por lo menos desde este punto de vista lo necesitaba. Lo ha recordado Benedicto XV y no le falta razónI: “Era de esperar que al «enemigo» no le gustara que el sacerdocio brillara de nuevo; él hubiera preferido verlo desaparecer, para que al fin Dios fuera arrojado del mundo. Y así ha ocurrido que, precisamente en este año de alegría por el sacramento del sacerdocio, han salido a la luz los pecados de los sacerdotes, sobre todo el abuso a los pequeños, en el cual el sacerdocio, que lleva a cabo la solicitud de Dios por el bien del hombre, se convierte en lo contrario.” Bueno, lo del bien está todavía por conseguir: Si realmente ocurre la purificación y la Iglesia consigue brillar por la santidad de nosotros, sus ministros. Por lo menos algo más de lo que últimamente estaba brillando…

Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda