Sábado, 20 de abril de 2024

Religión en Libertad

Blog

Tu matrimonio como Dios lo pensó.

Todo un parto. Comentario del Evangelio para Matrimonios: Juan 16, 20-23a

por http://proyectoamorconyugal.es/

EVANGELIO

Nadie os quitará vuestra alegría
Lectura del santo Evangelio según san Juan 16, 20-23a
 
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
- «En verdad, en verdad os digo, vosotros lloraréis y os lamentaréis, mientras el mundo estará alegre; vosotros estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en alegría.
La mujer, cuando va a dar a luz, siente tristeza, porque ha llegado su hora; pero, en cuanto da a luz al niño, ni se acuerda del apuro, por la alegría de que al mundo le ha nacido un hombre.
También vosotros ahora sentís tristeza; pero volveré a veros, y se alegrará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestra alegría. Ese día no me preguntaréis nada».
 
Palabra del Señor.
 
 
Todo un parto.
 
Vinimos a este mundo a través de un parto, el que tuvo que sufrir nuestra madre. Así también, nuestra fe y nuestra filiación divinas, son fruto del parto de una Madre, nuestra Santísima Virgen, que nos dio a luz a los pies de la cruz. Así todos, tú y yo también, tenemos como origen el amor y nacemos por la puerta del dolor. El que pretende tener un hijo por egoísmo, no conoce la dignidad del ser humano, y el que pretende ahorrarse los sacrificios de tenerlo tampoco. Ningún ser humano merece menos que ser fruto del amor y de un gran sacrificio. Por eso somos recibidos con tanta alegría.
 
En última instancia, podríamos decir que nacemos del Amor del Padre y somos dados a luz por la Cruz del Hijo. De ahí nuestra enorme dignidad, de ahí nuestra enorme alegría que nadie nos podrá quitar.
 
Aterrizado a la vida matrimonial:
 
Maite: No sé cómo puedes estar alegre, después de la cosas tan duras que te dije ayer. Yo estoy fatal.
Ramón: Maite, lo de ayer fue grave, no le voy a quitar importancia, y está bien que te arrepientas y pidas perdón para volver a dejar las cosas en su sitio, pero yo estoy alegre porque sé cuánto me quiere Dios, y sé la dignidad que me ha dado para poder amarte precisamente en esa circunstancia como Él. Y sé cuánto me quiere Cristo y cuánto me ha amado que se entregó por mí a pesar de ser peor que tú. Ahora tengo la oportunidad de hacer yo lo mismo, y no la voy a desaprovechar. Sé que has pasado por un momento de debilidad, pero tú tienes la misma dignidad enorme que yo tengo, y tenía que tratarte como Dios quiere que lo haga, para poder sanar tu herida.
Maite: Pues me quito el sombrero, Ramón. Lo has hecho genial. Te estoy muy agradecida por tu amor y tu sacrificio por mí. Doy gracias a Dios por ti.
(Y su unidad creció como fruto del amor y del sacrificio, que siempre van de la mano).
 
Madre,
 
Soy hijo del amor y del sacrificio, esposo para amar y sacrificarme y nuestros hijos son frutos de ese amor y de ese sacrificio. Mi vida está marcada por el amor, y por eso estoy alegre. Alabado sea el Señor que nos hace partícipes de Su amor y por eso se alegra mi espíritu en Él, mi salvador. Amén.


 

 

 
 
Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda