Según estimaciones realizadas por el Arzobispado de Barcelona, la audiencia que se calcula tendrá la visita de Benedicto XVI a Santiago de Compostela y Barcelona en todo el mundo equivale a unos 150 millones de personas.
 
Para ello, alrededor de 2.000 periodistas de los cinco continentes han solicitado poder informar sobre la visita del Papa los días 6 y 7 de noviembre próximo según ha informado el cardenal Lluís Martínez Sistach.
 
En Barcelona se establecerá un centro de prensa en el recinto de las Drassanes, junto al Museo Marítimo, desde donde los periodistas acreditados serán trasladados en autocares lanzadora hasta los puntos de información establecidos por la organización de la visita papal en el centro de la ciudad. En el interior del templo de la Sagrada Familia los periodistas no podrán informar en directo de los detalles de la misa que presidirá el Papa pues se instalarán inhibidores de teléfonos móviles que lo impedirán por medidas de seguridad, ha indicado el purpurado.
 
Sólo las imágenes ofrecidas en exclusiva por la cadena autonómica TV3 del interior del templo informarán del desarrollo de la eucaristía, a la que asistirán los Reyes Juan Carlos y Sofía, entre otras autoridades religiosas y civiles.