La policía italiana quedó asombrada cuando a las 9 de la mañana del pasado domingo  5 de mayo encontró a un sacerdote vestido con sotana que intentaba entrar en San Pedro del Vaticano llevando una pistola cargada, un destornillador y un cúter, en una mochila. La agencia ANSA añade que además llevaba dos cuchillos.

El hombre se llama Milan Palkovic, de 58 años, sería párroco de una parroquia de República Checa y acudía acompañando a unos 30 peregrinos checos.

Para mayor asombro de los agentes, dijo que el arma que llevaba en la mochila (cargada, con munición) no era suya, sino de otra persona que la llevaba "como defensa personal, de uso personal". Parece que esa otra persona (al parecer, un hombre de 60 años) le pidió al cura que llevara la bolsa para superar con más facilidad los chequeos de seguridad.

La policía italiana no sólo impidió la entrada a la plaza de San Pedro a estas dos personas sino que los denunciaron por llevar armas sin estar autorizados. Esto sucedió unas horas antes de que el Papa se asomara como cada domingo al mediodía a la ventana del Palacio Apostólico para rezar el Regina Coeli. En la plaza se congregaron unos 15.000 fieles y peregrinos.

Un buscado por violencia detenido hace 3 semanas

Hace pocas semanas, el 10 de abril, la policía italiana que vigila el Vaticano arrestó a un hombre que intentaba entrar en la audiencia general del Papa con 3 cuchillos de 20 cm en la mochila. Los agentes descubrieron después, con sorpresa, que se trataba de Moisés Tejada, de 53 años, buscado por la Oficina de Investigaciones Especiales de la policía del Estado de Nueva York, por robos con violencia. Tejada aseguró que venía de luchar en Ucrania junto a las tropas de Kiev.