San Alejandro I, papa y mártir. 3 de mayo, 16 y 27 de marzo.

Las Actas de Alejandro, Evencio y Teódulo, ficticias, pretenden recoger el martirio de santos reales, cuyas sepulturas en la Vía Nomentana, en el segundo miliario, están localizadas y gozaron de culto primitivo. La leyenda les hace relacionarse con otros santos como San Quirino (30 de marzo y 30 de abril), Santa Balbina (31 de marzo) y San Hermes (28 de agosto), pero la relación no va más allá que la cercanía de sus sepulcros. Para más inri, al Alejandro mártir se le ha identificado nada menos que con el papa Alejandro, que asumió el solio pontificio a inicios del siglo II. Probablemente sería contemporáneo con estos mártires, e incluso podría haberlos sepultado él mismo, pero no hay prueba alguna para que fuese el mártir Alejandro venerado en las mencionadas catacumbas. Igualmente, aquí me limitaré a contar lo que la leyenda nos ha trasmitido y ya lo demás, pues lo sabremos en el cielo.

Fue San Alejandro elegido obispo de Roma en el año 105, siendo el quinto sucesor de San Pedro (29 de junio, martirio; 18 de enero, Cátedra de Roma; 22 de febrero, cátedra de Antioquía; 1 de agosto, "ad Víncula", 16 de enero, "ad Víncula" en la Iglesia oriental; 18 de noviembre, dedicación de su Basílica). El “Liber Pontificalis” le atribuye el inicio del rito de poner unas gotas de agua en el cáliz de vino en la Eucaristía, así como el uso del agua bendita. Pero igualmente, estos usos son algo más tardíos. 

A Alejandro igualmente se le arroga la invención de las Cadenas de San Pedro, el inicio de su veneración y la Dedicación de la iglesia de "San Pedro in Vincoli". La leyenda cuenta que, estando preso Alejandro, el tribuno Quirino le presentó a su hija Balbina para que fuese sanada. Esta besó las cadenas de Alejandro, quien le dijo que debía besar las del príncipe de los Apóstoles, que se hallaban en la misma cárcel. Halladas las cadenas de modo milagroso, comenzaría su culto. Pero, realmente, esta iglesia sería dedicada en 439 por el papa Sixto III y el culto a las supuestas cadenas de San Pedro data del siglo VIII, luego de la restauración de dicha iglesia por el papa Adriano I.

Entre 107 y 130 (las fechas bailan) el papa Alejandro habría padecido el martirio de la siguiente manera: Una vez convertido Quirino, este liberó a Alejandro, quien junto a sus presbíteros Evencio y Teódulo, bautizaron a cientos de personas, convertidas por Quirino (algunas versiones hacen obispo a Evencio y diácono a Teódulo). Cuando lo supo el emperador Aureliano, hizo que Quirino y todos esos bautizados fueran arrojados al mar. Entonces tomó a Alejandro y lo mandó tender en el potro, donde fue atormentado con antorchas y raspados sus costados con peines de hierro. Alejandro no decía ni una palabra, por lo cual le preguntaron "¿Por qué callas? ¿Por qué no te quejas?" Alejandro respondió: "Cuando un cristiano calla, ora y habla a Dios". 

A la par, eran torturados Evencio, quien tenía 81 años, y Teódulo. Como nada les hacía cejar, Alejandro y a Evencio fueron arrojados a un horno encendido, dejando a Teódulo fuera para que, al ver la espantosa agonía de los otros dos, tuviera miedo y apostatara. Pero Teódulo no se dejó intimidar, sino que, al contrario, se las ingenió para meterse también en el horno con sus compañeros. Milagrosamente el fuego no les dañó, sino que, al contrario, les hizo más fuertes y animosos para la batalla. Entonces Aureliano mandó decapitar a Evencio y a Teódulo, dejando a Alejandro para que fuera repetidamente apuñalado.

Estaba Aureliano contento con su "victoria", cuando se oyó una voz desde el cielo que clamó: "Aureliano, hemos abierto las puertas del cielo a los que acabas de matar, y a ti las puertas del infierno". Y efectivamente, Aureliano cayó fulminado, se mordió la lengua y murió abrasado de un fuego invisible.

Los  cuerpos de Alejandro, Evencio y Teódulo fueron sepultados fuera de la ciudad, en la Via Nomentana, a dos millas de Roma, como escribí al principio. Sus reliquias actualmente se veneran en la Basílica de Santa Sabina, Roma. Otras reliquias se veneran en Lucca y en Freising. En Stavelot, Bélgica, existe un bello relicario de San Alejandro del siglo XII, en el que se contendrían otras diversas reliquias.

Fuentes:
-https://www.heiligenlexikon.de/
-"Vidas de los Santos". Tomo IV. Alban Butler. REV. S. BARING-GOULD. 1916.
-Liber Pontificalis.
-"Lives of Popes". Volumen I.

A 3 de mayo además se celebra a:
La Invención de la Santa Cruz.
Santos Timoteo y Maura, esposos mártires.
Santos Alejandro y Antonina de Cardaune, mártires

Otros santos papas son:

San Esteban I. 2 y 30 de agosto.
San Telesforo. 5 y 30 de enero (carmelitas), y 22 de febrero.
San Dionisio. 19 de enero (carmelitas) y 26 de diciembre.
San Celestino V. 19 de mayo.
San Cleto. 26 de abril.
San Ceferino. 26 de agosto.
San Inocencio I. 28 de julio.
San Gregorio III. 28 de noviembre.
San Sergio I. 8 y 9 de septiembre.
San Melquíades. 10 de diciembre.
San Agapito I. 22 de abril y 20 de septiembre, la traslación.
San Lino. 23 de septiembre.
San Urbano I. 25 de mayo.
San Silvestre I. 31 de diciembre.
San Eugenio I. 2 de junio.
San Hormisdas. 6 de agosto.
Beato Gregorio X. 10 de enero.
San Zacarías. 3, 15 y 22 de marzo.
San Marcos. 7 de octubre.
San Calixto I. 14 de octubre.
San Gelasio I. 21 de noviembre.
San Agatón. 10 de enero.
San Lucio I. 4 de marzo.
San León IX. 19 de abril.
San Aniceto. 17 de abril.
San Julio I. 12 de abril.