San Pablo "el Simple", monje. 7 de marzo, 4 de octubre, 18 de diciembre y 11 de enero.

Hay varias fuentes sobre este santo, pues tanto Paladio, como Rufino y Sozomeno hacen referencia a él. Fue Pablo un hortelano rudo, quien un día halló a su mujer con otro hombre. Entonces, decepcionado de todo, dejó el mundo y se fue al Desierto. En la Tebaida halló a San Antonio Abad (17 de enero), pidiéndole ser su discípulo. Sin embargo, el santo no quiso aceptarlo, porque Pablo tenía más de 60 años y a esa edad hacerse a la vida monástica es muy difícil.

La respuesta de Pablo "el Simple", fue simple: quedarse fuera de la ermita de Antonio hasta que este le admitiera. No decía una palabra, ni insistía, ni miraba al santo patriarca. Esa humildad venció a Antonio, quien temiendo que el viejo Pablo se le muriera a la intemperie, le dejó entrar a su ermita. Para probarle, cuenta Paladio, Antonio encargó a Pablo que tejiera una cuerda con hojas de palma, la cual le ordenaba deshacer al ponerse el sol, y así, día tras día, sin que Pablo protestara por la inutilidad de aquella tarea. Otras veces ponía un trozo de pan delante de él, y luego de orar largo rato, le decía "Hemos mirado el pan, eso bastará de cena; ahora descansemos". Nunca protestó por aquello "el simple" Pablo.

Cuando Antonio creyó que ya Pablo estaba listo para la vida eremítica, sabía orar los salmos de memoria y estaba templado en el ayuno y la penitencia, le dejó tener su ermita relativamente cerca de la suya. Realmente Antonio admiró cuan pronto se adentró Pablo por los caminos del Señor, pues en breve este tenía una oración altísima, recibiendo grandes dones de Dios, entre ellos el de exorcizar a los demonios. Incluso en ocasiones, según Sozomeno, Antonio le enviaba endemoniados que el mismo no podía liberar, quedando libres las personas

En una ocasión, estando Antonio discutiendo sobre asuntos espirituales con algunos prelados que le visitaban, Pablo, que era analfabeto de todo, preguntó "¿Vivieron los profetas antes de Jesucristo, o Jesucristo antes de los profetas?". Antonio, molesto con aquella tontería, le mandó callar y apartarse, lo cual hizo Pablo enseguida, yéndose a sus labores. Como los prelados asomaron alguna sonrisa a costa del "tonto", Antonio les replicó: "¡Oh, hermanos míos! aprended de este hombre como debe ser nuestra obediencia a Dios. Si yo digo algo, él lo hace instantánea y alegremente. Y nosotros, ¿nos comportamos así con nuestro Dios?".

Pablo murió sobre 339.

Fuentes:
-"Vidas de los Santos". Volumen III. Alban Butler. REV. S. BARING-GOULD. 1916.

A 7 de marzo además se celebra a
San Basilio y compañeros mártires de Quersoneso.
Santos Apolonio y Filemón, mártires.