San Inocencio I, papa. 28 de julio y 12 de marzo.

Nació en Albano, y su padre, a decir de San Jerónimo (30 de septiembre y 9 de mayo, traslación de las reliquias) fue el papa San Anastasio I (19 de diciembre y 22 de abril), a quien Inocencio sucedió luego de la muerte de aquel, en 410. Algunos prefieren interpretar esta filiación como espiritual, refiriéndose a que era su discípulo. En aquel siglo V, el término "hijo", se utilizaba para ambas acepciones. Aunque de su vida se conoce poco, sí que constan sus desvelos por el Evangelio y la Iglesia. Fue celoso en el cumplimiento del celibato eclesiástico y en afirmar y reafirmar la definitiva autoridad del Sumo Pontífice cuando las iglesias locales no sabían dirimir sus asuntos, o estos las superaban en jurisdicción, o en asuntos de fe y moral. Y así se lo hizo saber en una carta a San Vitricio de Rouen (7 de agosto).

Fue el firme defensor del gran San Juan Crisóstomo (27 de enero, traslación de las reliquias a Constantinopla; 30 de enero, Synaxis de los Tres patriarcas: Juan, Gregorio y Basilio; 13 de septiembre, muerte; 13 de noviembre, Iglesia oriental; 15 de diciembre consagración episcopal) cuando fue expulsado de su sede constantinopolitana por las intrigas de la emperatriz Eudoxia y del Patriarca de Alejandría, Teófilo. No solo intentó persuadir al emperador Arcadio, sino que se negó a reconocer a los varios sucesores que tuvo el santo obispo en la sede. Además, confirmó las condenas al pelagianismo que los concilios de Cartago y Milevo habían efectuado, y alabó a los obispos por "haber consultado a San Pedro", en referencia a la solicitud que los obispos africanos habían hecho acerca de que les confirmara en la fe católica. Es Inocencio quien, de esta manera, daría pie a la célebre frase "Roma locuta, causa finita".

Ese mismo año de 410 Roma fue saqueada por hordas del rey godo Alarico. El papa estaba negociando con el emperador Honorio en Rávena, para que hiciera la paz con Alarico. A su regreso se volcó en la reconstrucción de las iglesias y casas destrozadas.

Dictó Inocencio, siempre según el "Liber Pontificalis", algunas normas eclesiásticas, como el ayuno de los sábados, que se diera al pueblo la paz antes de la comunión del presbítero. Es así que un gesto típicamente del pueblo, que expresa su perdón antes de presentar las ofrendas, pasa a ser algo del sacerdote, quien se reconcilia con el pueblo antes de comulgar. Además, restringió la celebración de la Confirmación al obispo. Edificó en Roma una iglesia a los Santos Gervasio y Protasio (19 de junio, traslación de las reliquias), que luego pasaría a llamarse de San Vital. Igualmente el "Liber" dice que ordenó 54 obispos, 30 presbíteros y 15 diáconos.

El santo papa murió a 12 de marzo del año 417, aunque no hay concierto sobre el tiempo que ocupó la sede de San Pedro. Baronio dice que 15 años, algunos hablan de 17, otros que 20. Fue sepultado en el cementerio de Ponciano.
 

Fuentes.
-"Vidas de los Santos". Tomo VIII. Alban Butler. REV. S. BARING-GOULD.
-"Año cristiano o Ejercicios devotos para todos los días del año". Julio. R.P. JUAN CROISSET. S.J. Barcelona, 1865.


A 28 de julio además se celebra a Santa Theodechildis de Sens, reina.