Santa Sunniva de Noruega, virgen, y ocho compañeros mártires. 8 de julio y 31 de agosto (traslación de las reliquias).

Su leyenda, la "Acta Sanctorum in Seljo" data del siglo XII, y fue escrita con motivo de la traslación de las reliquias, por lo que no tiene fiabilidad histórica alguna. Solo es un relato para explicar una devoción surgida en el siglo X, a partir de la supuesta invención de las reliquias.

Fue Sunniva una princesa irlandesa que quería consagrarse totalmente a Cristo, y ante los deseos que sus padres tenían de casarla con un pagano, huyó de su casa junto a su hermano Albano y siete amigos. Llegaron a la orilla del mar y tomaron un barco abandonado, sin remos ni velas, al que la Providencia guió hasta las costas de Noruega, específicamente a la isla de Selje. Allí pensaban consagrarse a Dios en la oración y la soledad, pero no contaron con que gobernaba el rey pagano Hakoon Hladir, un feroz enemigo de los cristianos. Este alentó a los lugareños a ser hostiles contra los cristianos, y a no dejarles en paz. Y tanto fue, que en una ocasión en que unas ovejas fueron robadas, los isleños acusaron a Sunniva y su grupo y se fueron a por ellos con antorchas y espadas. Se refugiaron en una cueva nuestros santos y para no ser linchados, Sunniva hizo oración y un derrumbe tapió la entrada de la cueva, dejando a los cristianos dentro, que murieron de inanición.

La leyenda dice que unos pescadores vieron luces salir de entre las rocas, y al acercarse sintieron un embriagador perfume. Cuando excavaron, hallaron el cuerpo incorrupto de Sunniva, que parecía dormir, y a su lado los esqueletos de Albano y los demás. Ciertamente, en 996, convertida Noruega, el rey Olaf I rescató los santos cuerpos, que depositó en un monasterio fundado por benedictinos ingleses, dedicado a la memoria de Santa Sunniva y Albano en la misma isla de Selje. Hay que decir que es a partir de dicha fundación cuando se hermanan Albano y Sunniva, pero los historiadores son unánimes en decir que el Albano al que se le dedica el monasterio es a San Albano de Verulam (22 de junio y 2 de agosto, traslación de las reliquias). Una vez halladas las reliquias de Sunniva y comenzar a darle culto en el monasterio, lo demás fue "hermanarles".

El 31 de agosto de 1170 las reliquias se trasladaron a la catedral de Bergen. A partir de este hecho, el culto se extendió por toda Noruega, y permaneció hasta el siglo XVI, cuando los herejes suprimieron a la fuerza todo culto católico, destruyendo iglesias y monasterios.


A 8 de julio además se celebra a Santa Morwenna de Cornwall, virgen.