Una pareja de lesbianas ha denunciado a la Iglesia Católica, concretamente a la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, después de que la organización caritativa católica Catholic Charities de la diócesis de Forth Worth las rechazara para un programa de acogida temporal de niños refugiados debido a su estilo de vida contrario a los fundamentos católicos.

Según informa, Life Site News, Fatma Marouf (musulmana) y Bryn Esplin (mormona) han demandado tanto a la jerarquía católica como al propio gobierno de Estados Unidos por “discriminación” por razón de sexo y religión.

Estas mujeres, ambas trabajadores de la Universidad de Texas, están casadas entre sí desde que Obama aprobara el llamado “matrimonio homosexual”, lo que vulnera los criterios que Catholic Charities de Forth Worth utiliza para ubicar niños refugiados temporalmente en familias.


“Esta misión es confiada a la Iglesia por Cristo”, afirma el obispo de Forth Worth, Michael Olson. "Sería trágico que Catholic Charities no pudiera proporcionar esta ayuda de acuerdo con los valores del Evangelio y la asistencia familiar que es tan esencial para estos niños".


El obispo Olson considera que el programa de acogida cumple con toda la legislación

En estos momentos el gobierno federal financia un programa de la conferencia de obispos de Estados Unidos para la llegada y acogida de refugiados así como para la acogida de niños provenientes de otros países. “El programa es fiel a la misión de la Iglesia de cuidar a los pobres y vulnerables”, asegura el obispo, que insiste en que cumple totalmente con todas las regulaciones federales.


"Permitir que rechacen a nuestros clientes es como si nuestro gobierno respaldara un conjunto de creencias religiosas sobre otras, lo que es inconstitucional", dijo el abogado Jamie Glicksberg, del bufete proLGTB Lambda Legal, que representa a estas dos mujeres lesbianas.

La pareja rechazada para este programa asegura que se siente “insultada” y que la organización católica hirió sus sentimientos por aceptar sólo para la acogida de estos niños a parejas heterosexuales, estables y que “reflejen a la Sagrada Familia”.