El doctor en Derecho Canónico y miembro del Tribunal Eclesiástico de Barcelona, Ramon Domenech, franciscano, ha declarado al ser consultado por la agencia Efe que las monjas mediáticas en Cataluña, Teresa Forcades y Lucía Caram, "están descolocadas" y que su misión no es "estar todo el día en los platós de televisión".

Domenech asegura que el Derecho Canónico no contempla ninguna dispensa temporal del hábito para dedicarse a la política, pese a que así lo anunció la benedictina Teresa Forcades, impulsora de la candidatura independentista de izquierda radical Procés Constituent.


Forcades habló de que podía pedir una "exclaustración" temporal para poder presentarse como candidata en las próximas elecciones autonómicas.

"Eso que ha dicho Forcades de que pedirá la exclaustración por dos años me ha hecho reír. No existe en el Derecho Canónico. Si cuelga el hábito después no puede volver", ha dicho el experto, que ha explicado que sí existe la dispensas de servicios para atender a familiares enfermos o por estudios, pero sin dejar de ser religiosos.

"¿Dispensa de votos y volver a profesar? Eso no existe en el Derecho Canónico. Creo que Forcades lee las normas según su criterio. Dar una dispensa por razones políticas, es la primera vez que lo oigo", ha afirmado el canonista.


"El Derecho Canónigo no habla tampoco de que no puedan dedicarse a la política", ha explicado el experto, franciscano desde 1959, que se licenció en Derecho en la Universidad de Lleida y se doctoró en Derecho Canónico en la Universidad Pontificia de Salamanca.



La monja Forcades en el mítin de la alianza de izquierda radical populista de Ada Colau

"Yo creo que el problema se ha desmadrado porque las dos religiosas se han apartado de su sitio. Todo el mundo puede defender sus ideas. Lucía Caram ha hecho una obra buena con los pobres, pero a mi me parece que ahora las dos se han descolocado un poco porque su misión es otra", ha argumentado el canonista.

El padre Domenech cree que la Iglesia no aplicará ninguna medida contra las dos monjas, pese a que ha destacado que "son contemplativas, de clausura, y andan todo el día de plató en plató de televisión".

Domenech ha criticado que "parece que estas dos religiosas vivan en la televisión, y eso hace daño a la vista, sin contar el daño que hacen a sus comunidades".

"Respeto mucho a Forcades y a Caram por el servicio que hacen a los más necesitados, pero no viven la realidad que prometieron. Si quieren que dejen de ser contemplativas y se hagan religiosas de vida activa -misioneras o activistas sociales en parroquias-, pero ellas van por libre y han ido por su cuenta", ha insistido Domenech.

"El Derecho Canónico dice que las religiosas contemplativas son personas dedicadas a la oración y al recogimiento. Una religiosa tiene una identidad y una misión. La identidad es su institución, que ella ha escogido libremente. Y su misión es lo que hace dentro de ella", ha explicado el franciscano.

Según Doménech, cada congregación -benedictina en el caso de Forcades y dominica en el caso de Caram- tienen sus normativas particulares y para que ambas se dediquen a la política sería suficiente con un permiso de sus congregaciones o del dicasterio de la Congregación de la Vida Consagrada, el ministerio vaticano para las órdenes religiosas.


El doctor en Derecho Canónico también ha reprobado "el lenguaje que utiliza sor Lucia Caram, porque se tiene que ser elegante en la vida, la elegancia no se puede perder nunca".

Según Domenech, la jerarquía eclesiástica será "prudente" con la actuación de las dos monjas "por eso los obispos están callados", aunque no les gusta que "vayan corriendo por los platós de televisión. Es como si un carnicero, en vez de estar en la carnicería, se pasara el día en la plaza".

"Aunque sé que Caram quiere la notoriedad para conseguir dinero para sus obras, le digo que no todo vale. Hay que mantener cierta dignidad. Y se han aprovechado de ser religiosas. Han encontrado el filón que las ha llevado aquí. Es una situación anómala. Hay religiosas que trabajan tanto o más que ellas cada día con los desfavorecidos y no salen en la televisión", ha concluido Domenech.