Todos los sacerdotes antes de ser ordenados han asumido un doble compromiso: el celibato y el rezar cada día la Liturgia de las Horas. Estas son dos obligaciones para ellos, y mientras que la primera era ampliamente conocida por los católicos son otros muchos los que no son conscientes de la importancia de esta oración diaria.

Prometer realizar la Liturgia de las Horas se entiende como rezar fielmente la Oración Litúrgica Oficial de la Iglesia a cada día. Con su rezo se une a la totalidad de la Iglesia Católica en todo el mundo. La palabra ‘católico’ significa universal y, de hecho, es una oración católica que une a los pueblos en oración en todas las partes del mundo donde se reza. Las lenguas pueden ser diferentes, pero las oraciones -la mayoría de las cuales son salmos- son rezadas por toda la Iglesia.

Sin embargo, no sólo los religiosos están llamados a rezar la Liturgia de las Horas. También los laicos pueden beneficiarse de los grandes frutos de su oración. De hecho, ya son muchos los grupos y realidades eclesiales que han adoptado el rezo de las Horas a sus rutinas. Muchas familias y también jóvenes también profundizan en la fe con ella.

¿Cómo podemos conocer y obtener abundantes beneficios y frutos del rezo de la Liturgia de las Horas? El padre Ed Broom, oblato de María Inmaculada, destaca que aprender a rezar la Liturgia de las Horas “requerirá tiempo y esfuerzo, pero indudablemente vale la pena invertir en ello dado que la Liturgia de las Horas es un valioso recurso no sólo para aprender el arte de la oración, sino para estar unidos a Dios, a la Iglesia y a todo el Cuerpo Místico de Cristo”.

De este modo, en su web, el padre Broom destaca algunos aspectos esenciales de la Liturgia de las Horas y los innumerables beneficios que proporciona su oración:

1. Oración Bíblica

 La Liturgia de las Horas es, ante todo, una oración bíblica. Hacer oración valiéndose de la Palabra de Dios tiene un poder y un efecto muy especial.

El padre Ed Broom defiende los grandes frutos del rezo de la Liturgia de las Horas

2. Los salmos

El corazón de la Liturgia de las Horas es el Libro de los Salmos del Antiguo Testamento. De hecho, de todos los libros de oraciones existentes no hay uno que pueda superar al Libro de los Salmos. Muchos de los 150 salmos tienen como autor humano al rey David. Sin embargo, el autor clave y esencial de los Salmos es Dios mismo: el Espíritu Santo.

3. Jesús, María y San José

Como motivación para que todos nosotros recemos los Salmo y la Liturgia de las Horas, es provechoso saber que la Sagrada Familia -Jesús, María y San José- rezaba los Salmos en casa, en la peregrinación al Templo de Jerusalén y en la sinagoga. Sigamos las huellas de la Sagrada Familia y emprendamos el rezo de los Salmos y la Liturgia de las Horas.

4. El ejemplo de los apóstoles

Al rezar los salmos, seguimos las huellas de los Apóstoles. Los Hechos de los Apóstoles describen a los Apóstoles yendo al Templo a horas fijas para rezar. Lo mismo ocurre con la Liturgia de las Horas: acudimos a Dios en oración a horas fijas del día.

5. Santificar las horas

Otro elemento clave de la Liturgia de las Horas es el mandato de Nuestro Señor de orar siempre sin desfallecer. Al rezar la Liturgia de las Horas se nos convoca a rezar en las distintas horas del día -en realidad, desde la mañana hasta la noche-.

6. Diferentes horas de oración en la liturgia de las horas

En el contexto completo de la Liturgia de las Horas, hay en realidad cinco tiempos diferentes designados para la oración; como tal, estos cinco tiempos diferentes están llamados a ser santificados. ¿Cuándo son estos tiempos específicos? La oración de la mañana (al levantarse hasta las 10 horas); la oración del mediodía (de 10 a 16 horas); la oración de la tarde (de 16 a 20 horas); la oración de la noche, antes de acostarse. La última oración de la Liturgia de las Horas es el Oficio de Lecturas. Esta oración puede hacerse en cualquier momento del día.

7. Las dos horas principales de oración: la de la mañana y la de la tarde

Las dos horas principales de oración en la Liturgia de las Horas serían la Oración de la Mañana (también llamada Laudes); luego la Oración de la Tarde (también llamada Vísperas). Se consideran las horas principales de la Liturgia de las Horas. Rezándolas en las horas designadas, las horas de la mañana son santificadas, así como las de la tarde. En una palabra, mediante el rezo constante y asiduo de la Liturgia de las Horas, nuestra vida se santifica y, por tanto, nuestra santidad retoña y florece.

8. Composición de la Liturgia de las Horas

Como ya hemos dicho, la quintaesencia y el corazón de la Liturgia de las Horas son los 150 salmos. Los 150 salmos se rezan en la Liturgia de las Horas en un ciclo mensual. Se dividen en cuatro semanas. A veces se le llama o denomina El Salterio. Por lo tanto, los diáconos y sacerdotes, así como los religiosos, rezan el Salterio, los 150 Salmos en su Breviario o Liturgia de las Horas cada mes.

9. Siguiendo el ciclo litúrgico de la Iglesia.

La Liturgia de las Horas sigue el mismo ciclo y ritmo del Año Litúrgico de la Iglesia, el ritmo del calendario de la Misa. Es decir, la Liturgia de las Horas sigue el ciclo normal de la Vida de Cristo, vivida y expresada en los Sacramentos, muy especialmente en la Misa. El ciclo de la Iglesia sería el siguiente: El Adviento que culmina en la Navidad y el Tiempo de Navidad, luego el Tiempo Ordinario (corto). Luego la Cuaresma y el Tiempo de Cuaresma, que culmina en la Pascua. Luego el Tiempo Pascual de cincuenta días que termina con la celebración de Pentecostés, la venida del Espíritu Santo. A continuación, vuelta al largo período del Tiempo Ordinario, que dura cerca de seis meses y termina con la celebración de la Solemnidad de Cristo Rey. A continuación, volvemos al inicio del año eclesiástico con el Adviento.

Numerosas familias católicas rezan juntas las laudes los domingos en casa

10. El santoral

Otra dimensión muy importante de la Liturgia, además de la Liturgia de las Horas, es la del Santoral. Por Santoral se entiende la celebración durante el año eclesiástico, tanto en las Misas como en la Liturgia de las Horas, de las vidas de los santos. En la Liturgia de las Horas habrá una antífona y un himno separados, una lectura especial para el santo, así como una oración final para honrar las virtudes del santo específico. ¿Cómo se pueden agrupar los santos? De esta forma: Pastores, Vírgenes, Mártires, Doctores de la Iglesia, Común de los hombres/mujeres, Apóstoles. La riqueza y la variedad de los amigos de Dios, los santos, es impresionante. Estos grandes hombres y mujeres nos incitan a perseguir la santidad de vida.

11. ¿Qué más?

Además de los Salmos en la Liturgia de las Horas hay otros elementos: Un himno de apertura, una breve lectura bíblica, un responsorio, el cántico de Zacarías (oración de la mañana) y el cántico de María (oración de la tarde). Luego hay oraciones de intercesión por la Iglesia y el mundo en general, tanto en la oración de la mañana como en la de la tarde. Por último, se reza el Padrenuestro, seguido de una bendición final.

12. ¿Con quién se reza?

 La Liturgia de las Horas puede rezarse individualmente. Dios escucha nuestras oraciones tanto si rezamos individualmente como de forma colectiva. Sin embargo, la Liturgia de las Horas (a veces llamada Breviario) puede rezarse colectivamente en grupo. Como sacerdote y religioso, rezo regularmente la Liturgia de las Horas por la mañana con un compañero sacerdote. Cuando se hace en grupo, se alterna el rezo de los Salmos.

13. Participación de los laicos

En los últimos años, los laicos han organizado grupos en los que se reúnen para rezar la Liturgia de las Horas. A veces hay una combinación de laicos rezando con sacerdotes y religiosos. De hecho, en la publicación mensual del Magnificat se inserta la Liturgia de las Horas, tanto de Laudes (Oración de la mañana) como de Vísperas (Oración de la tarde).

14. Modos de rezar la Liturgia de las Horas

Los monjes contemplativos, así como las Hermanas, a menudo han adoptado el hábito de no sólo rezar la Liturgia de las Horas, sino de rezar mediante el canto o la salmodia. Como afirma San Agustín «¡El que canta, reza dos veces!». Así sucede con la Liturgia de las Horas.

15. En el contexto de una misa

Además, la Liturgia de las Horas puede rezarse en el contexto de la misa. De hecho, la oración se llama en realidad La Liturgia de las Horas. Por lo tanto, se puede insertar en el contexto de la Liturgia, la misa misma.

16. Electrónicamente

La Liturgia de las Horas en su totalidad consta de cuatro tomos grandes. Ahora bien, para quienes viajan, pueden obtener el Breviario App y rezar la Liturgia de las Horas electrónicamente en su teléfono u otros dispositivos electrónicos.

17. Los frutos del rezo de la Liturgia de las Horas

Los frutos del rezo de la Liturgia de las Horas son muchos:

 + ENRIQUECER SU VIDA DE ORACIÓN. Naturalmente, al rezar las Horas, tu vida de oración se robustecerá.

+ CONOCIMIENTO BÍBLICO. Asimismo, al rezar las Horas su conocimiento bíblico mejorará.

+ MEMORIZAR VERSOS. Con el tiempo comenzará a memorizar ciertos versos y temas y esto formará parte de su memoria y formación intelectual.

+ UNIÓN CON LA IGLESIA. Rezar las Horas te une más firmemente al Cuerpo Místico de Cristo que es la Iglesia y sus miembros.

+ LA SANTIFICACIÓN. Rezar las Horas recae sobre la propia Iglesia. No sólo se reza con la Iglesia, sino que se reza por la Iglesia.

+ LA PAZ INTERIOR. Una auténtica oración produce la paz interior del corazón, de la mente y del alma.

+ A LA DISCIPLINA EN LA ORACIÓN. A muchos de nosotros nos falta orden y disciplina. Por medio del rezo de las Horas en un tiempo y lugar determinados podemos empezar a ordenar lo desordenado de nuestra vida y tener una disciplina que muchas veces nos falta realmente.

Concluimos, después de esta explicación breve de la Liturgia de las Horas y de sus muchos frutos que descenderán sobre nosotros y sobre el mundo entero, con la esperanza de que consideres seriamente emprender la maravillosa práctica de rezar la Liturgia de las Horas y recojas una abundante cosecha espiritual.