El cardenal Patrick D’Rozario, la máxima autoridad católica en Bangladesh, ha visitado los campos de refugiados rohinyas en el distrito de Bandarban. Aquí se refugian miles de musulmanes que huyeron del país vecino, Myanmar.

Dirigiéndose a ellos, dijo: “La primera ministro de Bangladesh, Sheikh Hasina, está con ustedes. Las personas caritativas están con ustedes. Rogamos a Dios Todopoderoso a fin de que se resuelva vuestra crisis”.  

La visita confirma la cercanía del purpurado a la población atormentada por la violencia perpetrada por dos partes –el ejército del país budista y los militantes musulmanes del Arakan Rohingya Salvation Army (ARSA) – la cual ya había sido expresada en una reciente carta de llamamiento.


El arzobispo de Dacca se dirigió a las localidades de Tumbro y Ghumdhum, donde escuchó las historias de persecución de varios desplazados, muchos de ellos ancianos y enfermos.

Una de estas personas es Sona Mehen, de 65 años, quien relató: “El ejército de Myanmar incendió mi casa. Los militares asesinaron a mi hijo. Yo soy muy anciana y no puedo caminar”.



El cardenal acarició las manos de muchas personas y se conmovió en varias ocasiones frente a su desdicha. Como cuando conoció a Nur Mahammad, de apenas ocho años, quien le dijo que su “padre fue asesinado por los soldados. Ahora aquí no comemos suficiente”.

Al encontrarse con los periodistas tras concluir la visita, el arzobispo de Dacca afirmó: “Está pasando algo inhumano. Los Rohinyas vivieron en Myanmar por generaciones, pero no tienen la ciudadanía. No es una nota positiva para el Myanmar. La cuestión más relevante es el motivo por el cual ellos no tienen la ciudadanía”.

Luego hizo un llamamiento a todos los líderes mundiales a fin de que se aboquen a resolver juntos la crisis. “Es responsabilidad de todos”, reafirmó.

Luego, el cardenal se reunió con Ali Hossain, vicecomisario del distrito de Cox’s Bazar, una de las zonas más afectadas por la emergencia humanitaria, al cual hizo entrega de 1 millón de takas (alrededor de 10.200 euros) recogidos por la Iglesia Católica del país para brindarles apoyo.

Por último, ha confirmado el esfuerzo de Caritas Bangladesh (caritasbd.org), que a través de las oficinas de  Chittagong está distribuyendo artículos de primera necesidad.