La persecución a los cristianos en países como Pakistán queda de manifiesto de manera clara en suceso como el de Peshawar, donde dos miembros de una familia cristiana han sido disparados y heridos por comprar una casa en un barrio musulmán.

El ataque se produjo el pasado 4 de junio. La policía ha detenido a varios de los responsables, pero el autor, Salman Khan, sigue en libertad.

Tal y como informa Asia News, hace aproximadamente un mes Nadeem Joseph compró la casa y se mudó a ella con su familia a finales de mayo. Pero entonces Salman Khan se presentó en la casa exigiéndoles que abandonarán inmediatamente el inmueble porque aquel era un barrio musulmán y los cristianos (como los hebreos) son considerados enemigos del islam.

Durante varios días, tanto Salman como sus hijos amenazaron e intimidaron a Nadeem y su familia. El día del ataque, Salman se presentó en la casa de Nadeem dándoles un ultimátum de 24 horas. Este cristiano respondió que él y sus familiares tenían el derecho de vivir donde quisiesen y que no se irían.

Al percatarse que tanto Salman como sus hijos llevaban armas fuego, Nadeem corrió a llamar a la Policía, pero antes de lograrlo fue disparado. Los agresores comenzaron a continuación a disparar contra los otros miembros de la familia, hiriendo en la espalda a su suegra.

Ningún vecino fue en auxilio de los cristianos heridos. La propia familia llamó a Emergencias y una ambulancia llevó a Nadeem y a su suegra al Hospital, donde todavía están ingresados, pero fuera de peligro.

Para Khalid Shahzad, activista cristiano que se puso en contacto con la familia de Nadeem y la Policía, este crimen muestra el alto nivel de intolerancia contra las minorías en Pakistán. “El principal culpable está aún libre, las Fuerzas del orden deben hacer lo posible para capturarlo y llevarlo a la justicia”.