En el viaje apostólico en Corea del Sur del pasado verano, Francisco quiso pasar de Seúl a Daejeon en un tren nacional de alta velocidad. La compañía de tren desde entonces ha señalado el asiento que utilizó y muchas personas piden reservas para emplear ese asiento histórico.

La compañía destina parte de lo recaudado en el deseado asiento a obras caritativas de la diócesis local. Esta semana ha llegado el primer cheque:  11.000 euros que el obispo destinará a madres solas en situaciones complicadas. Es lo que ha recaudado "la silla del Papa" en 4 meses.

La decisión de la Korea Railroad Corporation - también llamado Korail, que es la empresa más importante de trenes de Corea del Sur - había sido preanunciada por el obispo de Daejeon, Mons. Lazzaro You Heung-sik, en noviembre pasado. Ahora que el asiento es famoso, cada vez que el tren sale alguien está sentado en esa silla.

El cheque lo entregó al obispo el director de la sucursal local de Korail. A AsiaNews, el prelado explicó que estos fondos no representan un hecho aislado: "El grupo dijo que la donación será sobre una base anual, por lo que ha decidido asignar fondos para un centro para madres solteras. Es maravilloso que las semillas lanzadas por Francisco durante su viaje a Corea continúe dando sus frutos".