El Patriarca latino de Jerusalén, Fuad Twal, llamó en la misa de Nochebuena en Belén a trabajar por la paz y la reconciliación entre palestinos e isralíes.

Recordó, como también hizo el Papa desde Roma, a los cristianos y musulmanes que sufren violencia en los países cercanos, mencionando especialmente a Siria, Líbano, Irak y a Sudán, país más lejano pero igualmente inmerso en violencia contra los cristianos.

Desde el lugar donde Jesucristo nació, el Patriarca latino animó a acabar con la violencia. "Desde este lugar santo, invito a los políticos y a los hombres de buena voluntad a trabajar de manera resuelta por un proyecto de paz y de reconciliación que abrace a Palestina y a Israel, y al Medio Oriente afligido", dijo Twal, que como Patriarca de Tierra Santa pastorea a los católicos latinos de Israel, los territorios palestinos, Jordania y Chipre.

"Oremos con fervor por nuestros hermanos en Siria, que mueren sin piedad (...). Oremos por el pueblo egipcio que lucha por el entendimiento, la libertad y la igualdad. Oremos por la unidad y la reconciliación en Líbano, Irak, Sudán, en los otros países de la región y en el resto del mundo", enumeró.

Twal presidió la gran misa de Navidad en la iglesia de Santa Catarina, contigua a la Basílica de la Natividad, el lugar del nacimiento de Cristo según la tradición, en presencia del presidente palestino Mahmud Abas, su Primer Ministro Salam Fayad y el ministro jordano de Relaciones Exteriores, Nasser Jawdeh.

En su homilía, el prelado de origen jordano rindió homenaje a los "esfuerzos y posiciones valientes" del presidente Abas y del rey de Jordania Abdallah II para obtener el reconocimiento de Palestina como Estado observador en la ONU.