Por primera vez en su historia, el régimen de Corea del Norte, el más opaco y menos libre de todo el planeta, está preparando un encuentro con líderes religiosos de Corea del Sur.

El encuentro tendría lugar en China, probablemente en Pekín o Shenyang, según ha adelantado el Ministerio para la Unificación del gobierno surcoreano, y se celebraría quizá este mismo mes.

Corea del Norte ha invitado a acudir a 14 delegaciones de entidades religiosas de Corea del Sur: católicas, protestantes, budistas, animistas y otras. Por su parte, el gobierno norcoreano enviaría representantes de las cuatro entidades "religiosas" autorizadas en el país: la Alianza Cristiana Chosun; la Alianza Budista Chosun; el Consejo Católico Chosun y el Consejo Religioso Chosun (animista).

En realidad, se trata de cuatro instituciones gubernamentales formadas por funcionarios que simulan representar el "pluralismo religioso" en el país de cara a la propaganda extranjera. El llamado "Consejo Católico" se inventó en 1989, copiando el modelo de la "Iglesia patriótica" china, pero al parecer sin fieles.


Desde 1962 el "Annuario Pontificio" del Vaticano sigue recogiendo como obispo de Pyongyang, la capital norcoreana, a Francis Hong Yong-ho, de quien no se sabe nada desde esa fecha. Si estuviera aún vivo, se trataría de un anciano de 105 años.

Tampoco se sabe nada de los 50 sacerdotes que estaban incardinados en la diócesis en los años 50 y principios de los 60. Mientras no aparezca el obispo desaparecido, para Roma el cardenal de Seúl, Nicolás Cheong Jin-Suk, es el administrador apostólico de Corea del Norte... si hubiese posibilidad de administrar algo, que no es el caso, aunque se rumorea que aún pueden quedar unos 4.000 católicos manteniendo su fe en el norte. Por contraste, el 10% de los surcoreanos es católico, y cada año se producen numerosas conversiones de adultos.


En Corea del Norte no se permite prácticamente ninguna práctica religiosa. El hueco espiritual lo ocupa la ideología "juche", que no cree en dioses pero sí en el culto al líder, el Partido, el pueblo o la patria.

Fuentes religiosas surcoreanas consultadas por AsiaNews consideran que el encuentro de entidades religiosas con las asociaciones norcoeanas será una pantomima sin resultados para la libertad religiosa.

"El hambre es un problema grave en Corea del Norte y los grupos religiosos surcoreanos son los más activos en la aportación de comida y ayuda sanitaria. Por eso, después de asegurar que han parado sus actividades nucleares para conseguir la ayuda de EEUU, ahora quieren ayudas también por esta vía", aseguran a la agencia de noticias.