L´Osservatore Romano hacía eco en su edición del pasado 16 de marzo de 2011 («Cambiamenti nel governo della Compagnia per rispondere alle sfide della missione», p. 7) de la carta que el padre Adolfo Nicolás, S.J., prepósito general de la Compañía de Jesús, dirigió a la familia jesuita para comunicar la decisión de una revisión del gobierno central de la congregación (la carta completa puede leerse en el siguiente enlace).

La revisión está orientada a la reestructuración de los secretariados de la curia de la Compañía de Jesús: se instituyen tres secretariados principales cuyo trabajo estará orientado a responder a tres dimensiones de la misión de los jesuitas: servicio a la fe, promoción de la justicia y la colaboración con los demás. Algún apostolado concreto que afecta a la misión de la Compañía tendrá un secretariado también (por ejemplo la educación y pastoral intelectual). Otros campos de misión también recibirán animación y seguimiento (por ejemplo diálogo interreligioso, medios de comunicación, etc.).

La carta del padre Adolfo también comunica que se instaura una «pequeña Comisión dentro del Consejo General para tratar, discernir y proponer temas que tengan que ver con nuestra misión común. Esta comisión estará constituida por los tres secretarios centrales, dos consejeros generales y el General mismo». Forman parte de este grupo los siguientes sacerdotes: P. Giovanni Cucci (ITA - Cultura - de la Civiltà Cattolica), P. José Funes (ARU - Ciencia, Astronomía - Observatorio Astronómico Vaticano), P. Michael Paul Gallagher (HIB - Teología - Universidad Gregoriana), P. Daniel McDonald (WIS - Sociología - Universidad Gregoriana), P. Theoneste Nkeramihigo (RWB - Filosofía - Universidad Gregoriana) y P. Hans Zollner (GER - Psicología - Universidad Gregoriana).

La carta del prepósito general, dirigida a todos los miembros de la Compañía de Jesús, concluye enfatizando que «Los cambios mencionados responden a la jamás olvidada invitación que nos hacen la Compañía y nuestra tradición a que no perdamos nunca de vista el objetivo de nuestra Compañía y a que busquemos los instrumentos más adecuados que nos ayuden a discernir la voluntad de Dios y a responder de modo generoso y eficaz a la llamada que Cristo nos hace a servirle en el mundo de hoy».