El profesor británico Robert Edwards, pionero del tan polémico como difundido tratamiento de la fertilidad, y considerado el «padre» del primer «bebé probeta», ha sido galardonado con el Nobel de Medicina.
 
Según el comunicado del comité Nobel, el investigador de 85 años ha sido recompensado porque «sus descubrimientos han hecho posible el tratamiento de la fertilidad que afecta a una gran parte de la humanidad y a más del 10% de las parejas del mundo».
 
Edwards está considerado el «padre» del primer «bebé probeta», Louise Joy Brown, en 1978. Junto a su compatriota Patrick Steptoe logró fertilizar un óvulo fuera del cuerpo de una mujer. Se calcula que unos 4 millones de personas han nacido después a través de la fecundación in vitro. Se estima que aproximadamente el 10 por ciento de las parejas sufren infertilidad.
  
La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, calificó de «gran noticia» la concesión del Premio Nobel a Edwards porque ha dado la posibilidad de «cumplir el anhelo de muchas familias que quieren tener hijos».