El Catecismo de la Iglesia Católica considera que "son básicamente inmutables y su obligación vale siempre y en todas partes", y que aunque Dios los revela a Moisés se pueden conocer desde la "ciencia moral" y la "moral natural", "accesibles a la sola razón".
San Ireneo de Lyon, ya en el siglo II, decía: «Desde el comienzo, Dios había puesto en el corazón de los hombres los preceptos de la ley natural. Primeramente se contentó con recordárselos. Esto fue el Decálogo, el cual, si alguien no lo guarda, no tendrá la salvación».
Ahora un sondeo de YouGov en Inglaterra, citado en The Telegraph, señala que hay 4 de los 10 mandamientos que la población inglesa ni entiende ni aprecia, ni siquiera los que se declaran cristianos. Son estos 4:
- No adorarás ídolos
- No usarás el nombre de Dios en vano
- No tendrás otro Dios
- Guardarás el sabbath (el sábado)
Según este sondeo, entre los que se declaran cristianos menos de 1 de cada 3 cree que el domingo debe preservarse como día de descanso y oración.
Y sólo un 38% cree que es importante no usar el nombre de Dios en vano. Y sólo un 43% condena la adoración de ídolos (no está claro si lo que en realidad refleja es el admitir que, civilmente, los no cristianos -por ejemplo hindúes, numerosos en Inglaterra- tienen libertad para ejercer sus cultos).
El alcalde musulmán de Londres visita el templo hindú Shri Swaminarayan Mandir en la capital inglesa
El resto de los mandamientos sí están bien vistos por la población en general y los cristianos: creen que está mal faltar al respeto a los padres, ser adúlteros, ambicionar las cosas de otros, dar falso testimonio, robar y matar.
Los mandamientos con más consenso son aquellos contra robar y matar: el 94% de los cristianos y el 93% de los no religiosos dice que son “importantes y relevantes”.
Que solo un tercio de los cristianos se tome en serio el domingo preocupa a las autoridades religiosas.
El Rabino Jefe de Inglaterra está haciendo campaña animando a la población a desconectarse de Internet en Sabbath, y el arzobispo anglicano de Canterbury respondió el martes (por Twitter) que era una campaña que le “animaba”.
Los católicos, que tienen un mandato directo de la Iglesia de asistir a misa los domingos y fiestas de guardar, mantienen casi en un 50% su convicción de que el festivo semanal debe protegerse y guardarse.
Pero entre los protestantes (anglicanos en su mayoría), en que la asistencia al culto el domingo se ve más como una recomendación piadosa, sólo un 30% se muestra a favor de este mandamiento.
Desde hace varios años, distintas entidades cristianas (con una mayoría de entidades católicas) buscan alianzas con organizaciones laborales para defender el domingo festivo, no laboral. Se trata de la European Sunday Alliance (www.europeansundayalliance.eu) o Alianza Europea por el Domingo, que insiste en la importancia de “proteger al domingo para proteger a la persona”.
Su tesis –compartida por católicos, protestantes, ortodoxos y judíos- es que cuando desaparece el festivo semanal la persona se convierte en una tuerca, un tornillo, un engranaje más de la maquinaria productiva. Acomodar una sociedad al domingo es acomodarla a la persona: de lo contrario, es la persona la que debe ser moldeada por las fuerzas meramente económicas.
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Si el hombre no sirve a Dios (con su domingo festivo) acaba sirviendo a la máquina (7 días a las semanas 365 días al año)