El cardenal George Pell, que fue primer prefecto de la Secretaría de Economía de la Santa Sede y durante años arzobispo de Sidney, es una de las voces más autorizadas de la Iglesia Católica, más si cabe tras haber pasado más de un año en la cárcel por un caso de abusos en el que el tribunal tuvo que rectificar y anunciar su inocencia.

El purpurado australiano ha valorado una vez más el desafío del llamado como “camino sinodal alemán” en el que se están intentando retorcer y cambiar las enseñanzas de la Iglesia al pedir la bendición de parejas del mismo sexo, la ordenación de mujeres o el fin del celibato sacerdotal.

Pell afirma que “sin duda” el Papa “hablará, tendrá que hablar, sobre este asunto para aclarar y reiterar la tradición”. Estas declaraciones las ha realizado a Gavin Ashenden en el podcast Merely Catholic, y que recoge Catholic Herald.

De este modo, el cardenal australiano recalcó: “tengo gran confianza en el sucesor de Pedro. A diferencia de las iglesias ortodoxa y anglicana, la Iglesia católica tiene un instrumento que creemos ordenado por Dios: Pedro, el hombre de la roca”.

El cardenal recordó igualmente que “el papel especial del papado  es mantener la pureza de la tradición apostólica y la unidad de la Iglesia en torno a esa tradición. Así que confío en que el Santo Padre hablará”.

En este sentido, Pell explicó que en la cuestión de las prácticas homosexuales o la ordenación de mujeres como sacerdotes no hay una situación “confusa o poco clara” donde las personas puedan “elegir entre una variedad de opciones”.

“Es bastante fundacional y bastante simple.  Apelamos a Cristo, apelamos a la revelación, a nuestra tradición judeocristiana y no a la sociología o a la medicina. ¿Qué peso le damos a la enseñanza de Jesús y los Apóstoles? Es un reto básico a afrontar”, se preguntó.

Y lanzó varias preguntas más: “es una cuestión de si crees que estamos bajo la tradición apostólica o somos sus maestros. ¿Nos sentimos libres de rechazar las enseñanzas de San Pablo? ¿Tenemos ganas de hacer eso, o la revelación y las enseñanzas de Jesús y los Apóstoles tienen una autoridad especial para nosotros?”.

La carta de cardenales y obispos

El mismo cardenal es uno de los más de 85 obispos de todo el mundo que han enviado una carta a los obispos alemanes para recordarles las verdades de la fe católica. En su opinión, es una “iniciativa importante” para demostrar “que la abrumadora mayoría de los obispos católicos en todo el mundo están con la Tradición”.

Igualmente, añadió que los obispos europeos que se inclinaban por cambiar la enseñanza católica estaban “encaminándose y mirando en la dirección equivocada” y estaban “empeorando una mala situación”.

“Las enseñanzas básicas son muy, muy claras”, dijo, y agregó que “más fundamentalmente, nuestros hermanos alemanes ignoran esto deliberadamente”. Del mismo modo, insistió en que los obispos alemanes “extrañamente, piensan que, al adoptar las enseñanzas del mundo que los rodea, van a ayudar a la Iglesia. La historia es unánime en demostrar que esto es absolutamente desastroso”.