Este sábado 15 de julio el arzobispo de Madrid, el cardenal Osoro, presidirá en la basílica Hispanoamericana de la Merced una vigilia de oración por la paz y la libertad en Venezuela. Se celebrará a las 22 horas y están llamados a participar todos aquellos preocupados por la deriva dictatorial y la ola de violencia en este país.

Según informa el Arzobispado de Madrid, la iniciativa partió de los sacerdotes y de la comunidad católica venezolana residente en Madrid, que rápidamente encontró el apoyo del obispado.

La posibilidad de realizar esta vigilia se produjo hace ya algunas semanas, después de que el arzobispo de Madrid coincidiera con varios venezolanos. El padre Ángel Camino, vicario de la Vicaría VIII –donde se encuentra la basílica–, estuvo presente en alguno de estos encuentros en los que “nos contaron sus dramas y nos transmitieron también los episodios habituales de opresión, de maltrato, de falta de comida y de medicamentos, de muertes... Le pidieron al cardenal arzobispo si podía hacer algo y el resultado es que, junto a la Vicaría de Pastoral Social, se ha promovido la celebración de esta vigilia de oración". "Los cristianos somos especialistas en oración, intentémoslo entonces”, asevera.

A la vigilia está invitado “todo el pueblo de Madrid, los cristianos y los no cristianos, para reunirnos y rezar, para crear conciencia y crear opinión, y para que no puedan seguir las cosas así en ese país”, subraya el padre Camino.

Jornada de oración y ayuno
Por su parte, la Conferencia Episcopal de Venezuela ha convocado para el 21 de julio una jornada oración y ayuno, dos meses después de la celebrada en mayo. Junto a la oración, los obispos piden a los católicos y todas las personas de buena voluntad que sostengan “todo esfuerzo para la salida de la crisis” actual y manifiesten su solidaridad con quienes más la sufren.

“Es hora de un cambio de rumbo en la orientación política del Gobierno”, afirma la Conferencia Episcopal Venezolana en un “mensaje urgente a los católicos y personas de buena voluntad” como conclusión de su Asamblea Plenaria.

La crisis existente desde hace años se ha agravado en los últimos meses –afirma el documento– por la convocatoria de la Asamblea Nacional Constituyente, que será elegida a finales de mes. Con esta decisión –subrayan– “la Constitución ha sido violada nuevamente” y el Gobierno quiere eliminar el resto de organismos estatales, principalmente la Asamblea Nacional, donde la oposición es mayoritaria.