La Madrugada de Sevilla ha sido un año más escenario de extraños incidentes y carreras, con ocho personas detenidas por alteraciones del orden público.

Los problemas comenzaron en torno a las cuatro de la mañana, con conatos de carreras y pequeñas avalanchas en un momento en el que coindicían en el centro de la ciudad seis procesiones. Según informa la edición sevillana de ABC, los incidentes tuvieron lugar en el barrio de Triana al paso de la Esperanza, en El Salvador y cerca de la Plaza de San Francisco y de la Avenida de la Constitución.

En las carreras, algunas personas han sido atendidas de lesiones leves o pequeños ataques de ansiedad.  Debido a las estampidas, la banda de San Juan Evangelista, que acompaña a la Esperanza de Triana, tuvo que abandonar la estación de penitencia por la pérdida y deterioro de instrumentos durante las avalanchas, y los nazarenos de La Esperanza de Triana o del Gran Poder abandonaron su sitio para evitar ser atropellados.

La calma se fue recuperando luego "progresivamente", según informaciones de la Policía Municipal.

Los primeros detenidos por desórdenes públicos se produjeron en Marqués de Contadero, tres personas que golpeaban al suelo y amenazaban a los presentes y que según fuentes del Ayuntamiento son "delincuentes comunes con antecedentes". En la zona de Argote de Molina fueron arrestados, también por gritos y amenazas,otras dos personas. A éstas se añaden otras tres, por lo cual se instruyen digilencias contra ocho personas en total en cuatro intervenciones policiales distintas. Según el Ayuntamiento, se trata de "hechos aislados de gamberrismo y vandalismo sin aparente conexión", que descartan una "acción organizada".