La Policía Nacional ha detenido a un hombre de nacionalidad marroquí, autor de varios delitos, como iniciador del incendio que el 8 de septiembre, fiesta de la Natividad de la Virgen, destruyó un antiguo retablo y hermosas imágenes en la iglesia de Fontellas (Navarra). El detenido ha confesado haber provocado el incendio y haber entrado en otras iglesias.

El incendio dañó a la imagen de la Virgen del Rosario, patrona de la localidad y otras dos imágenes de la Virgen que se encontraban en el interior de la iglesia. Una de las imágenes estaba vestida con valiosas galas, al tratarse deuna festividad solemne mariana.

El párroco alertó a los bomberos del fuego al mediodía del jueves ya que vio el humo que salía del campanario del templo. Los bomberos sofocaron el fuego con rapidez y las autoridades locales comenzaron una investigación al respecto ya que había indicios suficientes para pensar que podía haber sido provocado. Parte de la ornamentación del techo de la capilla se cayó y la nave del templo quedó negra por el hollín.



Así han quedado las imágenes marianas quemadas en la iglesia de Fontellas


El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Tudela (Navarra) ha acordado el alejamiento de centros religiosos católicos y de actos y ceremonias públicas o privadas de este mismo culto para el marroquí detenido.

Encausado por una falta contra el patrimonio histórico, el auto recoge que según la Policía Nacional la quema de la talla de la Virgen, ocurrida el día 8, responde «estrictamente a motivos ideológicos de carácter religioso».

Para el juez, el alejamiento dictado es una medida «cautelar» ante «una situación objetiva de riesgo» ya que, tras un viaje estival del sospechoso a su país de origen, Marruecos, la Policía ha detectado un «cambio de actitud», al pasar de «un vida totalmente normal» y «sin incidentes conocidos», al ataque a la iglesia de Fontellas, que causó un daño material y moral.

Y añade que éste es «un momento de difícil control de determinadas acciones más o menos coordinadas por parte de una facción Islámica contraria a los valores religiosos occidentales», lo que, «unido a su confesión en los hechos, a su falta de arrepentimiento» y a sus manifestaciones de «haberse ganado el cielo» aconsejan la decisión adoptada.

Un criterio que el juez ve reforzado además por la investigación en curso de otros hechos similares cometidos en las últimas fechas en iglesias de otras localidades cercanas en las que al parecer el detenido ha admitido verbalmente haber entrado por la fuerza y dañado determinados símbolos religiosos.


El Arzobispo de Pamplona-Tudela, Francisco Pérez González, expresó su "tristeza, dolor y repulsa" por el ataque a la iglesia, un acto que "ofende a todos los habitantes de Fontellas y a todos los cristianos de Navarra". En un comunicado explicó que atacar la imagen de la Virgen "es ofender a quienes la queremos como madre" y quien "merece el respeto de todos".

"Ahora le pedimos por la paz en todo el mundo, por la paz en nuestra tierra y por la paz en nuestros corazones. Que no permitamos que se asiente en nuestros corazones sentimientos de rencor o resentimiento y que la libertad religiosa sea querida para todos y respetada por todos".



Así salía la Virgen en procesión el pasado 1 de septiembre en Fontellas

El Arzobispo pidió que "estos tristes acontecimientos hagan más fuerte el amor de todos los navarros a la Virgen María" y muevan a la "misericordia y caridad".

Desde su cuenta de Twitter, el portavoz de la Conferencia Episcopal, José Mª Gil Tamayo, publicó: "Nos unimos a la tristeza,dolor y repulsa de Iglesia en Navarra por ataque al templo e imágenes sagradas de Fontellas"