Tras la debacle socialista y el triunfo arrollador del Partido Popular en las elecciones del pasado domingo en España, Religión en Libertad ha querido pulsar la opinión de destacadas personalidades de la sociedad civil sobre las acciones que debe acometer el nuevo Gobierno de Mariano Rajoy para una regeneración moral y de valores en España. ReL ha preguntado a miembros activos de la sociedad civil como Ignacio Arsuaga, Benigno Blanco, Antonio Torres, Jaime Urcelay, Antonio Arcones, Gador Joya, Ignacio Camuñas, Alfredo Dagnino, Juan Manuel Cotelo, Eduardo Hertfelder, Miguel Ayuso, Francisco José Contreras o Raúl Mayoral.

Periodistas como Juan Manuel de Prada, Miguel Ángel Velasco, Cristina López Schlichting, José Luis Restán, Alfonso Merlos, Gonzalo Altozano, José Javier Esparza, Eulogio López o Paco Pepe Fernández de la Cigoña. Las respuestas son esclarecedoras.

Miguel Ángel Velasco Puente, prestigioso periodista y director del semanario Alfa y Omega, que se encarta todos los jueves con el diario Abc, responde a la pregunta de ReL con estos términos: "Me parece de perlas cuanto haga el nuevo Gobierno en el terreno económico, pero de nada servirá, y antes o después volveremos a las andadas, si no afronta las causas, en vez de las consecuencias. La sociedad española está gravemente enferma y, lo que es peor, algunos no parecen quererla curar. El pan del espíritu, de la cultura, de la educación, es más determinante e imprescindible que el pan que comemos. Los principales retos –donde los ciudadanos españoles nos la jugamos de veras- están, en mi opinión, en tres ámbitos decisivos: familia (y por tanto vida), educación y medios de comunicación. Y en mandar definitivamente al baúl de la historia los resentimientos zapateriles, y fomentar, impulsar, reconstruir, la unidad de España. Eso no es de izquierdas ni de derechas, sino de por encima".

Ignacio Arsuaga, fundador y presidente de Hazteoir.org, la plataforma cívica más activa en los últimos años, considera que Rajoy debería llevar a cabo cinco acciones fundamentales:

1.- "Derogar la ley del aborto y aprobar una ley de reconocimiento del estatuto jurídico del embrión y de apoyo a la maternidad".

2.- "Restablecer el matrimonio estable como la unidad básica de la sociedad, garantía de progreso".

3.- "Acabar con educación para la Ciudadanía y garantizar la libertad de los padres para educar a sus hijos conforme a su conciencia".

4.- "Reformar el IRPF para aumentar el mínimo familiar exento por hijo a cargo y establecer el criterio de renta per capita para acceder a los beneficios y ayudas de la Administración".

5.- "Crear un Ministerio de Familia".

El escritor y periodista Juan Manuel de Prada, director del programa de televisión Lágrimas en la Lluvia de Intereconomía TV, así como artículista en Abc, XL Semanal o la revista Misión, considera que "todo esfuerzo de regeneración tiene que empezar por una restauración de las virtudes privadas y públicas, empezando por la virtud de la justicia, que consiste en dar a cada uno lo suyo, lo que por naturaleza le corresponde. A la vida que ha empezado a gestarse la vida que le pertenece, al matrimonio su dignidad sustantiva, a los padres el deber de educar a sus hijos. Digo deber y no derecho, porque la `sociedad de los derechos´, como se ha revelado, termina por autofagocitarse; hay que potenciar una `sociedad de los deberes´, vinculada, incluyente y fuerte. Habría que acabar para siempre con la "envidia igualitaria", causa primera del atávico cainismo español, y recuperar el sentido del sacrificio, la austeridad y la abnegación, para acabar con los dispendios administrativos y con el materialismo que hace a las sociedades sobornadas impotentes al esfuerzo vital. Pero esta restauración de las virtudes sólo puede tener un motor religioso".

Para Cristina López Schlichting, periodista de la cadena COPE y directora del programa de fin de semana Dos días contigo "el Gobierno habrá de ser un ejemplo de austeridad, sinceridad y trabajo. Todos tenemos que comprender que empieza un tiempo de recortes extremos, en el que habrá que trabajar más por menos dinero. Una época en la que no se podrá mentir, ni almibarar los datos de la realidad. Es un momento inmejorable para hacer la gran reforma educativa que necesita nuestro país, a partir de la cultura del esfuerzo y del respeto a la autoridad del profesor".

"Paradójicamente –continua Schlichting– una parte del camino ya ha sido recorrida, porque la crisis ha tenido la virtualidad de dejar a la desvalida sociedad española literalmente apoyada sobre los pilares más atacados por recientes campañas gubernamentales: familia e Iglesia. El impulso de estas instituciones será en realidad una manera de reconocer el valor que éstas aportan para sostener a los cinco millones de parados y cimentar la cohesión nacional".

Alfredo Dagnino, Consejero Delegado del Grupo Intereconomía y ex Presidente de la Fundación San Pablo-CEU, señala a ReL que "la victoria del Partido Popular en el día de ayer debe abrir una nueva etapa en la construcción del futuro de España. Una España que para muchos de nosotros y para muchos españoles es motivo de honda. Una España que afronta una profunda crisis y que se encuentra de nuevo en su historia ante una encrucijada. Una España necesitada de ilusión y esperanza, de liderazgo y altura de miras, que depara a quienes ahora asumen las responsabilidades de gobierno de la Nación importantes retos. Una auténtica oportunidad histórica que no se puede desaprovechar. Una oportunidad que ha de serlo para transmitir confianza, seriedad y buen hacer en la gestión de los asuntos públicos, que permita sentar las bases de una recuperación económica, que, a buen seguro, será lenta y de gran exigencia. Pero una oportunidad tambien para replantear no pocos aspectos medulares de nuestra convivencia civil, entre ellos, una imprescindible regeneración moral desde la afirmación de verdades y valores morales fundamentales que han de vertebrar la sociedad, así como para afrontar una ingente tarea de reconstrucción nacional en muy diversos ordenes de la vida de España y de nuestra sociedad".

José Luis Restán, director editorial de la Cadena COPE, y uno de los principales y más prestigiosos periodistas de información religiosa que hay en España, manifiesta que "dado que la regeneración moral y cultural sólo puede venir de los sujetos sociales vivos, la primera tarea del nuevo gobierno debería ser abrir el campo para que se expresen, construyan y eduquen las realidades vivas de la sociedad civil. Pasar de la ingeniería social y el proyecto ideológico a la subsidiariedad. Pasar del laicismo a una laicidad abierta y positiva. Dentro de ese marco, es urgente una reforma educativa que prime la libertad de los padres y la libertad de iniciativas, y que fortalezca los contenidos de la gran tradición humanista occidental. Otro campo urgente es la política familiar. Reconocer sin ambages que la familia es un bien social de primera magnitud, que no es intercambiable por otro tipo de uniones o formas de convivencia, y por eso debe ser políticamente protegido. Por último es decisivo un mensaje claro a favor de la cultura de la vida, suprimiendo la aberración del derecho al aborto".

Para Ignacio Camuñas, ex ministro del Gobierno de España y actual presidente del Foro de la Sociedad Civil, "si hablamos de regeneración moral en España es porque estamos de acuerdo que se ha producido un proceso de degeneración, o si se prefiere, de profundo deterioro de los valores morales en la sociedad española. Ello no se ha producido en un día y data ya de varias décadas y es algo que no se puede revertir de la noche a la mañana por un simple cambio de gobierno. Es algo que nos llevará décadas pero estoy de acuerdo en que algún día hay que empezar. Convendría por ello comenzar por un conjunto de medidas que supongan :

1.- "Luchar decididamente contra la corrupción que anida en amplias y perfectamente conocidas esferas de la vida pública".

2.- "Posibilitar eficazmente que los padres puedan elegir libremente la educación de sus hijos".

3.- "Medidas de protección decidida de la familia y la conciliación laboral".

4.- "Derogación de la Ley del Aborto".

5.- "Regular la unión civil de parejas homosexuales evitando la confusión con la institución del matrimonio".

6.- "Acción firme contra el tráfico de drogas y estupefacientes".

7.- "Promover una reforma de la Justicia que garantice su independencia y real eficacia".

Para el empresario Antonio Torres, que a su vez es presidente de la Fundación RedMadre que ayuda a mujeres que tienen un embarazo imprevisto a llevar a cabo la gestación, "el reto del nuevo Gobierno es inmenso pues el daño moral hecho a la sociedad española ha tenido tintes de revolución cultural. Y una buena forma de ayudar a regenerar España desde el poder puede ser empezar a hablar bien de lo bueno: si desde el Gobierno se agradece a las madres su maternidad, si se felicita a los esposos que mantienen su lealtad matrimonial, si se apoya a los padres que educan a sus hijos en virtudes, si se habla de la vida como el bien superior que es, las cosas empezarán a cambiar. Y si, además, a las palabras empiezan a seguir los hechos a través de leyes y políticas públicas que apoyen y amparen la maternidad, el compromiso matrimonial, la vida y la libertad de educación, España empezará a ser un país con valores fuertes, creativo, esperanzado, solidario y con futuro".

El periodista Eulogio López, director de Hispanidad.com considera que "la regeneración moral de España pasa por:

1. "Moral es vida. Si no se fomenta la natalidad seguiremos siendo un país en consunción. Necesitamos la instauración de un salario maternal. Con ello eliminar el aborto. Se trata de cambiar la mentalidad mortecina, el principal problema de esta España tristona. Regenerar es volver a generar".

2."Derogar el divorcio exprés. Que el matrimonio civil imponga una serie de compromisos para hombre y mujer".

3."Cheque escolar".

4."Duplicar el salario mínimo, cambiar cuotas sociales por IVA y exención de impuesto de sociedades para empresas de menos de cinco trabajadores: una sociedad de emprendedores".

5."Restaurar la conscripción".

El periodista José Javier Esparza, director del programa Con otro enfoque de Intereconomía TV, y autor de best-seller de temática histórica, indica a ReL que "la crisis económica sólo es la superficie de lo que nos pasa. Si yo fuera presidente, como decía Tola, reformaría a fondo la enseñanza en todos sus niveles, la haría más exigente y más clásica, y en la misma batería de medidas derogaría la ley del aborto, suprimiría EpC, derogaría el `divorcio exprés´para fortalecer a la familia, dejaría de alimentar con fondos públicos a medios de comunicación de inspiración disolvente (que compitan de verdad como medios privados que son), plantearía un programa de política familiar bien organizada, me tomaría en serio la restricción de la inmigración ilegal, trataría de asegurar por todos los medios la libertad religiosa real en sus manifestaciones públicas (porque eso es bueno para la moral social) y propondría objetivos de cohesión nacional en las políticas culturales públicas. E intentaría asegurar esa política durante más de cuatro años de manera sostenida, que es el único modo de obtener resultados".

Francisco José Contreras, catedrático de Filosofía del Derecho en la Universidad de Sevilla, y uno de los más claros exponentes de la nueva hornada de pensadores de corte conservador-católico, señala a ReL los retos para la regeneración  de España:

1.- "Derogación de la ley del aborto: sustituirla por regulación “a la polaca” (supresión del coladero de la “salud psíquica”; implantación de comisiones médicas que acrediten la gravedad del peligro para la madre o la malformación del feto)".

 2.- "Derogación de la Educación para la Ciudadanía".

3.- "Derogación de las leyes socialistas sobre matrimonio (“divorcio exprés” y matrimonio gay".

4.- "Prohibición de la “píldora del día después”.

5.- "Plan Integral de Ayuda a la Familia y de Promoción de la Natalidad (implantar coeficientes correctores de las pensiones de jubilación, en función del número de hijos que se hayan tenido)". 

6.- "Recuperación de la LOCE (derogada por Zapatero apenas llegó al poder): examen de reválida mediada la ESO; diversificación de itinerarios educativos a partir de los 14 años".

7.- "Posibilidad de recibir enseñanza en castellano en toda España".

8.- "Retirada de subvenciones a sindicatos y asociaciones `culturales´".

Alfonso Merlos, periodista de experimentada trayectoria y conocido por el gran público por conducir programas de radio en COPE y dirigir con gran éxito De hoy para mañana de la nueva cadena de televisión 13TV, señala que "el primer desafío del nuevo gobierno de España pasará por alumbrar un gran debate nacional para que la sociedad tome conciencia de que la crisis moral y de valores que nos aqueja es más grave, más profunda y más compleja que la económica, la política o la institucional, y que aquella es causante última de éstas. Urge deszapaterizar, a través del consenso de las elites y la calle, el endemoniado proceso de relativismo que ha impulsado el PSOE y el nacionalismo en los últimos años. En última instancia, los poderes públicos deben animar a que los españoles revisen y reconsideren lo que se ha legislado en relación al Bien y al Mal, a la vida y a la muerte. Las derivadas son de gran fuste: cómo derrotar al terrorismo, cómo entender la libertad religiosa y educativa o cómo reconsiderar el camino hacia el aborto y la eutanasia".

Benigno Blanco, Presidente del Foro de la Familia subraya a ReL que para que se dé la regeneración en España se debe "dar ejemplo de amor a la verdad. La verdad importa: un Gobierno que miente y engaña hace un inmenso daño a un país. Un Gobierno que diga la verdad sobre lo fundamental puede ayudar a regenerar un país. Por eso yo le propondría a Rajoy que hable de la familia como un inmenso bien social; que se refiera a los matrimonios que perduran en sus compromisos y educan a sus hijos en los valores objetivos del humanismo como de los grandes héroes que necesitamos; que manifieste que una sociedad no es digna de ese nombre si se desentiende de los más débiles e indefensos: los no nacidos, los enfermos, los ancianos, los discapacitados; que elogie la austeridad, el esfuerzo, la responsabilidad, el trabajo bien hecho, la esperanza, ... como claves imprescindibles para salir de la crisis. Y luego que en sus actos y decisiones sea consecuente con lo que dice".

Gador Joya, ginecóloga y portavoz de Derecho a Vivir considera que "el señor Rajoy debe demostrar por la vía de los hechos su intención de combatir el proyecto Zapatero, que ha atentado frontalmente contra el derecho a la vida. Es preciso que elimine el sistema de plazos que convierte el aborto en un derecho de la mujer, que acabe con el coladero del riesgo para la salud psicológica, y con el supuesto eugenésico que permite eliminar a aquellos concebidos que no cumplen determinados criterios de calidad. Además deberá promover políticas de ayuda a la maternidad y de protección a la familia, aunténtico pilar de nuestra sociedad".

Paco Pepe Fernández de la Cigoña, el blogero católico de mayor influencia en el mundo hispano, declara a ReL lo siguiente: "Mi respuesta es sencillísima: No creo que el nuevo Gobierno vaya a afrontar ningún reto para la regeneración moral de España. No le interesa nada. Intentará regenerar la economía y nada más. Seguiremos con divorcio y aborto, tal vez sin EpC y con menos beligerancia contra la Iglesia. Tal vez con alguna menos corrupción. Para una regeneración moral tendrían que regenerarse la mayoría de ellos y no creo tengan la menor intención".

Gonzalo Altozano, director del semanario Alba, y director del programa de televisión Dando Caña, los domingos en Intereconomía TV, señala a ReL que "si quiere regenerar España, Mariano Rajoy tendrá que perderle el miedo a conjugar el verbo abolir: divorcio express, matrimonios homosexuales, liberalización del aborto... Si no lo hace -y si no lo hace dentro de los primeros cien días- la derecha española volverá por donde solía: a hacer las veces del administrador del cortijo que pone orden en las cuentas a la espera de que vuelva el señorito (en este caso, "la PSOE"). En cualquier caso, todo parece apuntar a que Rajoy no hará tabla rasa del proyecto de ingenieria social de Zapatero. En los siete años del zapaterato, los socialistas han sacado adelante casi una veintena de leyes en este sentido. El PP solo presentó dos recursos de inconstitucionalidad. Y lo hizo con poco entusiasmo. En fin, la derecha sin remedio".

Raúl Mayoral, Director General de la Fundación San Pablo-CEU es de la opinión que "hay dos ámbitos claves en los que debe actuarse: el de la educación y el de la economía. En ambos nos jugamos el futuro de la nación. En el primero, es urgente una reforma del concepto y significado de la escuela, como agente de formación e instrucción de quienes serán los hombres del mañana. En lo económico, debe lograrse la sanación de todo el tejido empresarial y del cuerpo laboral de España con medidas que sitúen a la persona en el centro del sistema. Simultáneamente, debe adoptarse un Plan de defensa de la familia en todos los órdenes. Solo protegiendo la primera y más vital célula de la sociedad puede edificarse con solidez una sociedad. En suma, educación, trabajo y familia conforman el columna vertebral de una nación."

Eduardo Hertfelder, Presidente del Instituto de Política Familiar subraya que "la familia no puede seguir abandonada y atacada como hasta ahora. España necesita un cambio, pero el auténtico cambio es la implantación de una política familiar. Ya no valen medidas aisladas o puntuales y, mucho menos, medidas que atenten contra la familia. Hace falta un verdadero plan de choque de apoyo y protección a la familia".

"Es imprescindible –continua Hertfelder– que la nueva administración que acaba de salir de las urnas ponga a la familia como su prioridad: apostar por la familia no es un gasto, es una inversión. Es indispensable que tenga en cuenta las necesidades de las familias cuando diseñe sus políticas públicas. Y esto pasa, entre otras cosas, por un Ministerio de la Familia, por dotaciones presupuestarias suficientes y por un plan integral de apoyo a la familia. Si no, o estará fuera de la realidad, o de espaldas a las familias".

Antonio Arcones, presidente de la Fundación Burke y de las editoriales Ciudadela y El Buey Mudo, considera que “lo más importante es que la sociedad recupere su espacio natural. Ello mejoraría tanto la economía como la vida social de España. Un gobierno valiente debería proponer una especie de pacto de neutralidad del Estado. Que deje de financiar, según las preferencias del partido dominante del momento, a los sindicatos, a los partidos, a la Iglesia, a la cultura (libros, cine, ONGs de todo tipo), a los medios de comunicación (lo hace de modo indirecto con la publicidad)…".

"No somos capaces de imaginar lo distinta que sería nuestra sociedad –dice Arcones– si no lleváramos 40 años de reingeniería social y de manipulación permanente de las conciencias con el dinero que previamente expolian a la sociedad".

Por último, Antonio Arcones manifiesta que "tengan vida las realidades que `naturalmente´ tienen vida. No las creadas y mantenidas artificialmente por los políticos. Creo que la Iglesia no debería tener miedo a ello. Muy al contrario, se mantendrían las instituciones que realmente tienen apego social. Sería el principio de una revitalización social y moral importantísima”.

El famoso comunicador Juan Manuel Cotelo, director del exitoso documental La última Cima, es de la opinión que "nada hay más urgente y dramático que la protección sin condiciones de la vida de toda persona, desde su concepción a su muerte natural. Sin esa base moral elemental, toda autoridad moral de un gobernante es falsa. Donde valga más el sano que el enfermo, el joven que el viejo, el grande que el pequeño, la base moral está dinamitada. Es importante recuperar también la cultura del esfuerzo. A los jóvenes se les ha mimado y adulado erróneamente, hasta disminuir en ellos su capacidad para afrontar retos grandes o incluso mínimos. Esa actitud sobreprotectora les ha convertido en seres agotados de no hacer nada, a los 20 años. También sería deseable que los políticos fomentasen el respeto mutuo, evitando la pelea, la humillación y la victoria sobre el otro. Los políticos y los periodistas podemos propagar ese clima de pelea continua, que en otros países no se da".

Jaime Urcelay, presidente de la asociación Profesionales por la Ética, que ha llevado el peso de la campaña a favor del movimiento objetor de conciencia con la la asignatura de Educación por la Ciudadanía, considera que "el primer desafío es que acepte realmente que sin regeneración moral no hay futuro en ningún ámbito de la vida española. El Partido Popular y su Gobierno necesitan ser capaces de articular una propuesta positiva de valores, sin tibieza ni complejos, en la que la persona ocupe el lugar central. A partir de ahí, creo que las prioridades están en la protección efectiva del valor de la vida en todas sus fases, la recuperación de los espacios de libertad y responsabilidad sociales y el fortalecimiento de la familia como primer y principal factor de desarrollo humano y comunitario. Son retos que exigen reformas legislativas de calado pero también políticas trasversales que propicien un ecosistema favorable".

Miguel Ayuso, Presidente de la Unión Internacional de Juristas Católicos, señal a ReL que "los escolásticos aconsejaban tomar las preguntas en serio. De manera que debe observarse, para empezar, que con poco nos contentamos limitándonos a los valores, pues no dejan de ser un subrogado subjetivista y a la postre economicista (no hay otros que los de la Bolsa) de las virtudes. A continuación, hemos de preguntarnos si ese futuro Gobierno tiene un tal propósito regenerador, pues no se ha exhibido en exceso en los últimos años, o se lo estamos atribuyendo gratuitamente. En tercer término, el contexto, poco favorecedor, de una sociedad crecientemente desestructurada y envilecida por un poder que ha perdido de vista el bien común, lastra y obstaculiza cualquier hipotético proyecto de ese género. Finalmente, las incoherencias en política (salvada la intención) de nuestra Santa Madre la Iglesia, no ayudan en exceso a un tal quehacer. El neosocialismo de los últimos años, reconvertido en progresismo nihilista no sin una pizca de resentimiento tosco, puede ser sucedido por un neoliberalismo reconvertible en tecnocracia (en el mejor de los casos) no menos nihilista. Dios no lo quiera. ¿Por qué no volvemos la vista, todos, al Reino de Cristo, sin el que no puede haber paz?".