Por la «tibia reacción» del rector ante «las desagradables» escenas ocurridas en la capilla de Somosaguas, escenario el jueves pasado de un acto de profanación por parte un grupo de estudiantes, la Confederación Católica de Padres de Alumnos (Concapa) ha exigido la dimisión del rector de de la Complutense, Carlos Berzosa.
 
La asociación considera en un comunicado que hechos como los sucedidos en el templo de la universidad «suponen uno más de los ataques a la libertad que se vienen produciendo, máxime cuando se trata de la Iglesia católica, a la que cualquiera se cree en disposición de agraviar porque no les gustan sus principios o no se comulga con sus planteamientos»,
 
Asimismo los padres católicos señalan que «no es suficiente un expediente como el que el Rectorado ha abierto. Los responsables de este incidente son mayores de edad y, por lo tanto, plenamente responsables civil y penalmente de los actos cometidos».
 
Los padres católicos no son los únicos que están exigiendo la dimisión de Berzosa. La Comunidad de Madrid, a través del consejero de Presidencia, Interior y Justicia, Francisco Granados, pidió también este martes la dimisión porque «es evidente que se le ha ido la Universidad de las manos. Y no de ahora, desde hace mucho tiempo», dijo el consejero.
 
El próximo viernes está prevista una misa «en desagravio» por lo ocurrido el jueves.
 
Según pudo saber ReL, el Obispado de Madrid está planteándose la posibilidad de elegir otro lugar que no sea la capilla de la UCM, sino otra con mayor capacidad, dada la gran acogida que ha tenido la propuesta de celebrar una misa en desagravio.
 
Asimismo se sabe que los organizadores no pretenden «hacer mucho ruido», y en la capilla de Somosaguas caben sólo unas doscientas personas. Dejar fuera a miles de asistentes, señalan, podría suponer un serio problema de orden público.