Unas 19.800 personas han visitado la basílica de la Sagrada Familia de Barcelona en el primero de los cuatro sábados de enero (8, 15, 22, 29) con jornadas de puertas abiertas, según ha explicado a Europa Press el Patronato del templo.

Esta cifra se ajusta a las previsiones de la organización, que había pronosticado llegar a los 20.000 visitantes totales durante la apertura, entre las 9.00 y las 14.00 horas.

En declaraciones a Europa Press Televisión, el presidente del Patronato de la Sagrada Familia, Joan Rigol, se ha mostrado satisfecho de que los ciudadanos hayan podido visitar el templo con fluidez.

Rigol, que ha lamentado que durante la visita del Papa mucha gente se quedara fuera, ha indicado que la capacidad de visitantes ha sido  mayor que durante la dedicación del Pontífice.

Durante la misa del Papa pudieron entrar 6.500 personas, aunque este sábado, "al no haber sillas y no tener que estar quieto, se ha superado esta capacidad", ha subrayado.

Para Rigol, si durante el resto de jornadas de puertas abiertas se mantiene la alta afluencia de visitantes, habrá que pensar "cómo y a qué ritmo" se permite a los ciudadanos seguir visitándola de forma gratuita, "por la vía de puertas abiertas o del culto".

En ese sentido, ha dicho que la magnitud "enorme" del templo impide que se puedan celebrar misas regulares. "En un acto con 200 personas, éstas ni se verían", ha dicho. Por ello, ha optado por que se acojan solo actos "con cierta presencia".

De todas formas, ha previsto que se mantendrá la entrada de pago como forma usual de visita. "Iremos viendo cómo encontrar la manera de que la gente pueda sentir la Sagrada Familia muy suya, pero coincidiendo con lo que es, un centro de visita turística importante".

Sobre el precio de la entrada, ha indicado que éste es inferior al de otros monumentos de Gaudí y que es necesario mantenerlo para asegurar la aportación económica que necesita el Patronato.