Evangelio según san Marcos 10, 28-31



En aquel tiempo, Pedro se puso a decir a Jesús:

«Ya ves que nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido.»

Jesús dijo:

«Os aseguro que quien deje casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por mi y por el Evangelio, recibirá ahora, en este tiempo, cien veces más –casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones–, y en la edad futura, vida eterna.

Muchos primeros serán últimos, y muchos últimos primeros.»
 



¡Oh María Virgen poderosa!

Tú, la grande e ilustre defensora de la Iglesia;

tú, Auxiliadora del pueblo cristiano;

tú, terrible como un ejército en orden de batalla;

tú, que sola destruyes los errores del mundo, defiéndenos en nuestras angustias,
auxílianos en nuestras luchas,
socórrenos en nuestras necesidades,
y en la hora de la muerte,
recíbenos en el eterno gozo.

Amén



San Juan Bosco