A estas alturas, pocos españoles ignoran que un autobús recorre España proclamando que "los niños tienen pene", y que semejante afirmación ha provocado la campaña de denigración pública más agresiva y unánime que se recuerda contra una organización privada en el ejercicio de su derecho a la libertad de expresión de una obviedad biológica. La campaña de HazteOir es respuesta a las leyes que pretenden imponer a todos los colegios el adoctrinamiento infantil en ideología de género, y a los anuncios de grupos LGTBI en marquesinas de autobuses del norte de España, asegurando que Hay niños con vulva y niñas con pene.

La respuesta política y mediática al autobús evidencia que la ideología de género ha adquirido de facto en España el estatus de doctrina oficial, un estatus de privilegio que hurta al debate público sus dogmas so pena de consecuencias penales y administrativas y en términos del quebranto del derecho al honor y a la neutralidad de los poderes del Estado.

En ese contexto, un humorístico vídeo difundido por La Contra TV recurre a una de las escenas más parodiadas del cine contemporáneo: la escena de El hundimiento (dirigida por Oliver Hirschbiegel en 2004) en la que Hitler (Bruno Ganz) adquiere conciencia en el búnker de Berlín la conciencia de la situación desesperada del Reich.