Patti Smith, de 66 años, incansable matriarca del punk rock, movimiento que nació con su álbum debut "Horses" en 1975, se colocó estratégicamente este miércoles en la Plaza de San Pedro y pudo dar la mano y hablar brevemente con el Papa Francisco cuando éste pasó para saludara a los fieles reunidos. 

La cantante se encontraba en Roma para una serie de conciertos y decidió ir a ver al Papa. Aseguró que había seguido el Cónclave por la televisión con mucho interés y que había deseado que el nuevo Papa se llamase Francisco, porque ella siente admiración por el santo de Asís, que para ella representa la humildad, la renuncia al materialismo y el amor a la naturaleza.



Patti Smith se educó en una familia religiosa, aunque no católica, y no va a la iglesia. En uno de sus grandes éxitos incluso canta: "Jesús murió por los pecados de alguien, no por los míos". Pero en la Plaza de San Pedro este domingo no se encontraba tan negativa, y aseguró que había encontrado al nuevo Papa "muy interesante" y que le "había gustado mucho".

Patti Smith no sólo es famosa por su música, poesía y artes visuales, sino por su activismo social. En 2012, la diva del pop, Madonna, dijo que Patty Smith era una de sus mayores fuentes de inspiración.